A pocos días para arranque la temporada 2018/19, la principal novedad de este curso será la presencia del Árbitro Asistente de Vídeo (VAR). Todos los partidos de la Primera División contarán con este nuevo método que no busca rearbitrar partidos, sino evitar injusticias.
Mínima interferencia, máximo beneficio
Con esas premisas se desarrollará el VAR en el fútbol. La idea principal es interferir en lo mínimo posible en el juego. En segundo lugar, se utilizará el VAR cuando haya un error claro y manifiesto por parte del árbitro que estén dirigiendo el partido.
Lo más importante son los supuestos en los que se utilizará el VAR, que son cuatro: goles, penaltis, tarjetas rojas directas y confusión de identidad.
Dentro de goles, pueden intervenir en los siguientes casos:
- Gol en fuera de juego.
- Falta previa en la jugada del gol.
- Si el balón ha salido fuera en la jugada del gol.
En penaltis, se tendrán en cuenta los siguientes aspectos:
- Penalti incorrectamente sancionado por el árbitro.
- Penalti claro no sancionado por el árbitro.
- Falta fuera del área incorrectamente sancionada como penalti.
- Penalti incorrectamente sancionado fuera del área.
- Falta en ataque en la jugada previa al penalti.
- Si el balón ha salido fuera en la jugada previa al penalti.
Para las tarjetas rojas:
- El VAR sugerirá revisar la decisión del árbitro de mostrar tarjeta roja directa por considerar que es un error claro y manifiesto.
- El VAR sugiere revisar la decisión disciplinaria del árbitro (amarilla o nada) por considerar que es un error claro y manifiesto.
Por último, para la confusión de identidad:
- Se tendrán en cuenta si el árbitro amonesta o expulsa al jugador erróneo.
- El VAR deberá intervenir para que sea amonestado o expulsado el jugador correcto.
En cualquier caso, el árbitro siempre toma la última decisión. El VAR solo intervendrá en errores claros y manifiestos, no en jugadas interpretables.