EL TERCER TIEMPO
El calendario avanza inexorable. Las fechas pasan, las jornadas no dan tregua, y el Rayo Vallecano continúa ahí, defendiendo cual titán en su barco la posición de ventaja con el resto de navíos. Un punto más cerca, un punto cosechado en Pucela en otra batalla que deja al equipo de Míchel con opciones intactas de ascenso directo.
Números y sensaciones
Las estadísticas que arroja este Rayo Vallecano de Míchel son extraordinarias. Después de 29 jornadas de Liga, son el equipo que menos partidos ha perdido del campeonato (4). Además, es el segundo más goleador de la categoría (49) y suma ocho jornadas consecutivas sin conocer la derrota. Es decir, los franjirrojos están segundos por méritos propios. Sin duda, es tremendamente complicado doblegar a este Rayo Vallecano.
Míchel ha sabido transmitir sus ideas a los futbolistas, y el equipo derrama buenas sensaciones en cada partido. Aunque en ocasiones no acaben de salir las ideas, es evidente que a estas alturas de la competición el Rayo Vallecano carbura. Y carbura bien. Quedan solo 13 kilómetros de esta larga maratón de 42km, y los vallecanos están en el vagón de cabeza, mirando por el retrovisor a todos esos otros equipos que aprietan para seguir la estela del buque franjirrojo.
En Valladolid, el equipo fue capaz de sacar un punto apretando los dientes, sufriendo, defendiendo aun a pesar de contar con un futbolista menos por la expulsión de Velázquez. Sí, Velázquez. Un punto que sirve para seguir sumando, un punto que, por cierto, hace que el Rayo Vallecano sea el segundo equipo con más empates de la Liga (12), algo que denota lo complicado que es vencer al cuadro de Míchel, y pone de manifiesto la importancia de sumar, siempre, y que deja al Rayo Vallecano un punto más cerca de la gloria.