Corría el minuto 52 y el Athletic acababa de adelantarse de nuevo en el marcador, con lo que ello suponía moralmente para un Rayo Vallecano que tenía que volver a remar contracorriente. Advíncula corrió a disputar un balón en profundidad, que ya había salido del campo, con Yuri Berchiche. En el forcejeo, el peruano impacta con el codo en la cara del rival, y tras la revisión del VAR, ve la segunda amarilla y fin del partido para él. Si antes tocaba remar contracorriente ahora lo tenías que hacer con uno menos.
Un error de bulto de uno de los jugadores que más se mira y juzga su rendimiento. Durante la temporada por llegar con la etiqueta del hombre más rápido del mundo y en este partido porque con la llegada de Paco Jémez su titularidad se tambaleó. El técnico canario no optó por el peruano ni contra Betis ni Eibar. Contra el Valencia jugó de titular y se consiguió una victoria clave y de mucho mérito, por lo que volvió a confiar en él para San Mamés. Desafortunadamente para él y para el Rayo acabó en las duchas antes de tiempo.
Y eso que hasta entonces estaba cuajando un buen partido. De hecho el hasta en el entonces único gol rayista en el marcador Advíncula jugó un papel fundamental. Es cierto que el centro al área que acaba con el remate de Álex Moreno es de Bebé, pero es el lateral peruano el que salva la jugada segundos antes evitando que el balón se pierda de banda en una carrera que solo él es capaz de realizar gracias a su velocidad.
Sin embargo, esa expulsión, que podría haber evitado, complicó sobre manera las cosas. Pensando en el próximo partido, seguramente Tito ocupe el lateral derecho, una posición que incluso favorece al veterano jugador. Sin embargo, eso obligará a retrasar la posición en la banda izquierda de Álex Moreno, que sin duda rinde más y se encuentra más cómodo jugando en el medio del campo y sin tener tanta responsabilidad defensiva. La otra opción es dejar al catalán donde mejor rinde y dejar el lateral izquierdo a Aki.
Veremos la opción que elige finalmente Paco Jémez en el partido crucial ante el Huesca el próximo sábado. Por el momento, lo que es seguro, es que Advíncula tendrá que ganarse de nuevo la oportunidad.