Alberto García no jugaba desde el 4 de diciembre de 2018, último partido en el que Míchel le colocaba como portero titular. Hoy recuperaba el puesto en el once inicial frente al Valencia, en esta ocasión con Paco Jémez en el banquillo, y no tardaba mucho en demostrarle que había acertado en el cambio.
El árbitro señalaba pena máxima tras la entrada de Gálvez a Rodrigo en el minuto 25. En ese momento Vallecas se ponía de pie, y Parejo se declaraba el dueño del balón para lanzar ese penalti. Bajo palos Alberto, que leía perfectamente las intenciones del 10 del Valencia, y detenía el balón para mantener el empate.
No solo paró el penalti, si no que estuvo muy activo durante el partido ayudando a que el equipo no encajase gol.