A finales de los 90 gambeteaba por las calles de Utrera el que sería ‘el fichaje más caro de la historia del Rayo’. Álvaro García Rivera (Sevilla, 28 años) intenta no pensar en esa etiqueta, pero es casi inevitable. El verano de 2018 el Rayo Vallecano pagó 5 millones al Cádiz para hacerse con sus servicios. Y aunque sus dos primeros años dejaron más dudas que aplausos, en este ha explotado para agasajar con su mejor versión. Él dice que es gracias al sistema de Iraola, que le favorece la verticalidad. Y lo tiene muy claro.
Sea lo que fuere, viene de casi dinamitar al Barça y partir en dos al Espanyol. El andaluz es un tipo sencillo, dicharachero y cercano. Reconoce que está en su mejor momento con la Franja y que tras el fausto intento de viaje a Miranda, se quedó a la intemperie y tuvo que quedarse en casa de un compañero. Con contrato hasta 2023 y cada vez más peso en el vestuario, Alvarito regala una tarde a Unión Rayo para charlar de toda la actualidad rayista. Para hablar de su vida en el campo y fuera de él. Y para demostrar que de ambición va sobrado.
#EntrevistaUR con Álvaro García
La que habéis liado en Cornellà-El Prat, vaya golazo para el 2-3. ¿Cómo viviste ser el héroe de aquella tarde?
Después del gol de Joni ellos se vinieron abajo y nosotros aprovechamos para apretar. Era nuestro momento. No me esperaba que me fuese a llegar esa pelota, porque la cogió Andrés en la línea de fondo y yo pensaba que la pondría de otra manera… Pero de repente me vi con el balón, controlé y la única opción que tenía era picarla, ya que Diego López estaba muy cerca. Te puedes imaginar, contentísimo. Es mi primer gol este año, ya tenía muchas ganas de ver puerta.
¿De dónde sale esa reacción para remontar un 2-0? ¿Fue algo que se organizó en el descanso? ¿Coraje puro?
Es un cúmulo de todo. Perdíamos 2-0, pero el partido no estaba para ese resultado. El peligro que nos creaban venía de fallos nuestros, que contra gente tan buena se convierte en goles. Pero la sensación era que si empezábamos bien la segunda parte, podíamos meterlos atrás. Ellos no se esperaban nuestra reacción, porque nadie perdiendo 2-0 en su campo les ha reaccionado así. Y nos lo llevamos.
Habéis pasado de estar a 11 del ascenso directo y con el golaverage perdido con el Espanyol, a poneros a 5 y con el golaverage ganado. Cómo ha cambiado todo tras esa segunda parte…
Sentíamos que nos estaba pasando lo mismo que ante el Mallorca, otra vez un partido importante que nos podía dar un salto hacia arriba y se nos estaba escapando… Eso nos hizo cambiar el chip y claro, como dices, ha cambiado toda la película. Ahora miras a la clasificación y te ves ahí, con opciones. En cuanto se despisten nos podemos meter a pelear por el ascenso directo. Pero hay que seguir con esta buena dinámica.
“Ante el Barça, con Vallecas lleno, no habría sido igual”
Hablando de ti. Un utrerano, fichaje más caro de la historia del Rayo. ¡Allí tienes que ser un ídolo!
Bueno… ¡Es que Utrera ha tenido mucho! Con Reyes, Ceballos, Caparrós… A mí me conocen, pero no tanto como ser un ídolo.
¿Sueles bajar mucho por Utrera? ¿Se quedó allí tu familia?
Sí, allí está toda mi familia. Ahora con la Covid no bajo prácticamente, antes sí, cuando tenía un par de días libres cogía un AVE y en 2 horas y media me plantaba, pero ahora con el coronavirus y el niño… Nada.
Llegaste a Vallecas en verano de 2018. Y en tu primer año tuviste muchas críticas. “Fichaje más caro de la historia”, había muchas expectativas y no terminabas de explotar. ¿Cómo viviste esa etapa?
Creo que no se dieron las circunstancias. Este año, por ejemplo, el sistema de juego del míster se adecúa más a mis características. Yo venía del Cádiz, que era algo muy diferente, allí jugábamos con un sistema muy defensivo basado en salidas a la contra. Llegué aquí y jugábamos a lo opuesto, me tocaba meterme por dentro, asociarme… Y me costaba. Este año somos más verticales y eso, sumado a la confianza que me da Iraola, me hace estar cómodo.
¿Pesa mucho la etiqueta de ‘fichaje más caro de la historia del Rayo’?
Sinceramente, yo no voy por ahí pensando “soy el fichaje más caro“, ni salgo a un partido pensando en eso. Pero sí es verdad que estos años que no me han estado saliendo las cosas, eso te come la cabeza. Lo vas pensando, le das vueltas… Pero intento no hacerlo. Es un hecho que, al final, no dependió de mí.
“El Espanyol no se esperaba nuestra reacción”
Este año sí lo estás rompiendo. Sólo te faltaba el gol y llegó en el RCDE. De hecho desde el 8 de noviembre has tenido minutos en todos los partidos, salvo en Copa ante Haro y Teruel, donde hubo rotaciones. Parece que ya te salen las cosas…
Claro, pero por lo que te he comentado antes. La forma de jugar me favorece, el equipo es más vertical, está replegado y sale a la contra. Yo me aprovecho de ese sistema porque mi forma de jugar es puramente la velocidad. Este año estoy teniendo la suerte de que el sistema del míster se amolda a mí y, encima, salen las cosas, porque si no se pondría a otro compañero.
Hablar del Rayo en estos tiempos es hablar de muchos temas extradeportivos. Uno de las últimos fue el viaje a Miranda. ¿Cómo lo viviste? ¿Llegaste a pasar miedo?
Sí, un poco de miedo pasamos. Tanto por el tema de los positivos que estaban saliendo, como por la tormenta. Nosotros íbamos en el autobús y confiábamos en el conductor, que iba con cadenas y bien preparado. Él aportaba tranquilidad en esos momentos. Pero una vez que dimos la vuelta el problema fue llegar a casa…
Porque llegasteis a la Ciudad Deportiva y, de ahí, que cada uno se buscase la vida…
Prácticamente. Yo dormí en casa de un compañero porque no pude coger el coche, era imposible moverlo con la nieve.
Poco después detonasteis la bomba: comunicado oficial de la primera plantilla. ¿Habéis conseguido que cambie algo con ese texto?
Estamos en ello. Nosotros intentamos que todo mejore y ponemos nuestro granito. Ojalá que poco a poco vaya funcionando todo mejor.
¿Cómo nació el comunicado? ¿Fue iniciativa de los capitanes? ¿De todos en conjunto?
Salió de todos. El comunicado habla por sí solo. No hay mucho que añadir.
Pero sí hay una crítica de la afición. Hay gente que dice ‘este comunicado llega tarde’. ¿Vosotros sentís que habéis tardado demasiado en pronunciaros?
Eso algo que no controlamos. A nosotros en realidad lo que nos importa es lo deportivo. Intentamos que todo funcione bien, que el club vaya lo mejor posible y sobre el campo estamos dando la cara. En el día a día no estamos tan pendientes de cosas de fuera porque nuestra función no es eso. Es lo deportivo.
“Vamos a pelear a muerte por ascender de manera directa”
Hay una palabra muy chocante en ese comunicado, pues decís sentiros ‘desamparados’. ¿También por la afición? ¿En estos tiempos de coronavirus, notáis el cariño de la gente?
Ya prácticamente nos hemos acostumbrado a jugar sin público, pero el cambio de estar con gradas a estar sin nadie es muy complicado. Y más en nuestro caso particular, porque Vallecas aprieta mucho y eso se nota. Encima este año, que las cosas están saliendo mejor… Imagínate cómo estaría el estadio en estos partidos. ¡La que se estaría formando! A nosotros nos vendría increíble. Echamos de menos el calor de la gente. En estos tiempos lo recibimos, pero no de la manera en la que llegaba en Vallecas.
Antes hablamos del viaje a Miranda, pero también fue sonrojante el caos de la eliminatoria contra el Elche. ¿Cómo viviste todo aquello? Ese trabajo a contrarreloj para quitar la nieve…
Estábamos a la expectativa, porque no podíamos hacer nada. Creíamos que Vallecas llegaría, pero una mañana nos dijeron que por la noche el campo se había helado. Y ahí se empezó a hablar de alternativas. Al final acabamos en Las Rozas…
¿Quién os iba informando de cómo iba el campo?
El delegado. Él también organizó los entrenamientos (en Valdebebas).
Al final disteis la cara, os clasificasteis… Pero todo después de estar 10 días sin competir. Eso tuvo que ser raro…
Pero es lo que tocó. La situación fue tan extrema y tan rara… El Leganés se fue al Wanda Metropolitano; el Fuenla a Las Rozas. Nosotros íbamos viviendo el día a día, sin pensar tampoco demasiado. Por suerte, a pesar de tirarnos 10 días sin jugar, todo salió bien. Incluso luego fuimos a Miranda y sacamos esos tres puntos.
“Estoy en mi mejor momento desde que llegué al Rayo Vallecano”
Volviendo a lo personal, hay algo que destacan todos tus compañeros, y son las compañías. ¿Quién es el apoyo de Álvaro García en los momentos complicados?
Sobre todo mi novia, que es la que me aguanta todo el día. También mi representante y mi familia. En ellos me apoyo, siempre han estado conmigo, desde que jugaba en el Utrera hasta ahora.
¿El fútbol es tan bonito como parece?
Es bonito, todo el mundo sueña con esto y somos unos privilegiados. Pero también tiene una parte no tan bonita en el ámbito personal. Cosas que te pasan, lesiones… Pero bueno, yo soy de pensar que no podemos quejarnos, porque somos unos privilegiados. Esto lo tenemos por el trabajo de toda una vida, desde pequeño quería ser profesional y hay que estar contento.
¿Cuán importante es la grada de Vallecas en los partidos de casa?
Vital, es ese plus que nos falta. El otro día contra el Barça, cuando nos ponemos ganando, sólo imaginar cómo habría estallado el campo con el gol… Bueno, al Barça se le habría hecho cuesta arriba y no lo habrían tenido tan fácil. Con Vallecas lleno no habría sido igual. La gente le da un plus, le da fuerza, ayudan muchísimo.
Esa frase de ‘con público el Barça no se escapa vivo’ la piensa mucha gente. Tú fuiste también clave en esa eliminatoria, saliste y provocaste el gol en apenas unos minutos…
Sus laterales subían mucho y eso propiciaba que dejasen muchísimo espacio. Acababan defendiendo con tres hombres, dos centrales (Araújo-Lenglet) y Busquets. En una de esas pillamos una contra y yo hice lo mío. Fran García pudo meter el gol… Y casi conseguimos pasar.
“El comunicado habla por sí solo. No hay mucho que añadir”
¿Está Álvaro García en su mejor momento desde que llegó al Rayo?
Sí, por minutos y sensaciones sin duda. Hasta final de la temporada pasada no había conseguido tener verdadera continuidad. Y en cuanto he encadenado cinco partidos seguidos jugando, lo he notado. Porque en esas coges confianza, tanto en ti como en tus compañeros. Este año estoy jugándolo prácticamente todo, así que sin duda, creo que estoy en mi mejor momento.
Tienes contrato hasta junio de 2023. ¿Qué planes de futuro manejas? ¿Te gustaría volver al Cádiz? ¿Seguir en Vallecas?
Yo de momento pienso en subir a Primera, eso es lo principal. Y nos vendría a todos bien. Le debo mucho al Rayo y tengo contrato. A día de hoy no me planteo cambios ni nada. Me quedan dos años y medio y estoy contento. Esta temporada estamos metidos en la pomada y tiene que ser el bueno. Hay que ascender.
Este domingo recibís al Tenerife (18:15 horas, Gol TV), luego vienen dos partidos seguidos fuera, en Cartagena y Málaga. ¿Cómo afrontáis este panorama?
Todo lo que se juegue en casa es importantísimo, hacernos fuertes en Vallecas es clave para estar arriba. Luego vienen dos partidos fuera y bueno… Esos serán algo más difíciles, pero tras los tres puntos contra el Espanyol y si ganamos al Tenerife… Ya creo que podemos ir a Cartagena y Málaga y volver con los seis puntos.
La última. A día de hoy… ¿Firmas el playoff?
No, estamos muy bien y confío mucho en mis compañeros. Vamos a pelear a muerte por ascender de manera directa, porque el playoff es complicado y ahí ya entran muchos factores. Así que no, tenemos que jugárnoslas todas al ascenso directo. Y si no, tendremos el playoff ahí, pero aquí no se firma nada.