OPINIÓN
Cada semana, y como viene siendo habitual desde hace un tiempo, un tertuliano o polemista que nunca ha seguido la actualidad del Rayo ni tiene vinculación con este equipo o con el barrio de Vallecas, le dice a la gente de Vallecas y a la afición del equipo franjirrojo cómo se tiene que comportar, a quién tiene que aplaudir y qué debe hacer para apoyar a su equipo.
En esta semana, la última de octubre, ha sido el turno de Javier Matallanas, que escribió un artículo elogiando a Presa, su gestión y despreciando a la afición del Rayo y a la gente de Vallecas con etiquetas y denominaciones ideológicas muy graves. Dicho artículo no aportaba ningún dato, ningún argumento serio y ninguna objetividad. Simplemente contenía elogios a Presa. Sus motivos tendrá Matallanas, y en un futuro no muy lejano lo sabremos y podremos entender ese intercambio de favores entre Presa y el propio Matallanas.
Sin embargo, de alguien que se dice periodista se le presupone más nivel, más educación y más respeto por sus propios compañeros. Primeramente, si Matallanas quiere criticar al Rayo, al menos que se documente e informe de la situación del club. Para ello estaría bien que siguiese la actualidad del Rayo, simplemente. Es decir, que primero se documente sobre el tema y luego opine, y no al revés, tal y como ha hecho. En segundo lugar, está muy feo insultar a parte de la afición del Rayo e insinuar que fue la afición del Rayo quien saboteó el Rayo – Real Madrid en la temporada 2012-13. ¿Tiene el señor Matallanas prueba de ello, o está acusando sin conocimiento de causa? En tercer lugar, estaría bien respetar el trabajo de otros compañeros de profesión. Matallanas debería respetar a periodistas profesionales, objetivos y serios que siguen cada día la actualidad del Rayo Vallecano, y que seguramente no estarán de acuerdo con su artículo elogiando la pésima gestión de Presa. Ya que dichos periodistas han sido muy críticos con el propio Presa y sus decisiones desde que llego al club. Señor Matallanas, sólo tiene usted que leer a los profesionales del mundo del periodismo que siguen al Rayo, como son Carlos Sánchez Blas, Raúl Granado, Israel Herráiz o a su compañero del Diario AS, Carlos Forjanes. Su artículo, señor Matallanas, es una falta de respeto para estos cuatro profesionales que le cito (y para otros muchos y muchas que siguen la actualidad del Rayo Vallecano de cerca).
Además, del grotesco artículo de Matallanas me sorprendió que usase tan a la ligera la palabra “extrema izquierda” para calificar a los aficionados del Rayo (ya sea a una minoría o a una mayoría). Sin embargo, el propio Matallanas habla de Zozulya en dicho irrisorio escrito y en ningún momento se atreve a afirmar su ideología, pese a que la misma ya ha sido demostrada por diversas fuentes. ¿Señor Matallanas, por qué juzga y pone etiquetas a miles de aficionados franjirrojos y no se atreve a hacerlo con el futbolista ucraniano al que tanto le gusta el Batallón Azov (si no sabe lo que es este grupo, puede informarse fácilmente)?
Tampoco vimos a Matallanas hablar ni criticar cuando el presidente del Rayo invitó hace unos meses a líderes de la ultraderecha de VOX al palco del Estadio de Vallecas, cuando por aquel entonces el público no podía acceder a los estadios y además Madrid estaba en plena campaña por las elecciones del 4 de mayo de 2021. Igual el señor Matallanas no fue crítico en su día con esta decisión provocadora y excluyente de Presa porque sentía más identificado con los invitados que con la gente de Vallecas.
Por último, y sin ánimo de extenderme, quiero lanzar una invitación al señor Matallanas. Le invito, señor Javier Gómez Matallanas, a venir a un partido del Rayo al Estadio de Vallecas (invito yo). De este modo, podrá usted ver la pésima situación del Estadio, los cacheos exhaustivos que nos hacen a los aficionados, el asco que dan los baños del estadio, así como la falta de mantenimiento Incluso, si usted lo desea podemos ir a la Ciudad Deportiva, hablar con las jugadoras del Rayo Femenino, esas mismas a las que Presa tenía trabajando sin contrato (situación que ya está en manos de la Inspección Laboral) o hablar con los jugadores de la cantera (esos mismos que sufren impagos desde hace meses) o simplemente con los trabajadores del club…
Además, podremos hablar con muchos aficionados que le darán su opinión sobre la nefasta gestión de Presa (y se sorprenderá al ver de primera mano que su apelativo de “extrema izquierda” está muy alejado de la realidad) y una vez el partido arranque, verá a los 14.000 aficionados que van cada jornada a Vallecas gritar lo mismo: Presa Vete ya.
Señor Matallanas, la invitación a Vallecas sigue presente. Al igual que, en caso de que la acepte, le invito a escribir sobre lo que usted vea de primera mano en la Albufera, y no detrás de un ordenador.