El comienzo de la temporada del Rayo Vallecano ha sido perfecto en lo deportivo en el estadio de Vallecas. Algo que contrastaba con la situación de los aficionados rayistas que han sufrido multitud de problemas en este inicio liguero.
Ante el RCD Mallorca aparentemente desaparecieron o se solventaron (al menos momentáneamente) algunas de las deficiencias de los problemas que demandaba la afición rayista.
No hubo quejas sobre los accesos. A pesar que muchos aficionados apuraron por el peligro de lluvia, ningún aficionado se quejó de colas o falta de accesos (sobre todo en Albufera). Tampoco ningún aficionado denunció problemas con los abonos (que no pasaban por el torno) o duplicados de entradas como ocurrió ante el Barcelona.
Unos cerca de 7000 aficionados (6.708 según LaLiga) se dieron cita en el recinto vallecano. El Rayo – Mallorca fue la cuarta mejor entrada de la temporada. Eso sí, fue la más baja desde la vuelta de los abonados. El mal tiempo y un partido en lunes hizo que faltaran muchos aficionados.