El Rayo Vallecano B cerró la primera vuelta en el grupo séptimo de Tercera División con un abultado, pero engañoso resultado (3-0) frente al Getafe B. El filial, que vivió una reconstrucción de su plantilla en verano, ha protagonizado una primera parte de la liga muy irregular, pero mantiene sus opciones de volver a clasificarse a los play-off de ascenso a Segunda B.
Números a mejorar
El conjunto de Luis Cembranos finalizó la primera vuelta con 27 puntos, situándose en la novena posición de la clasificación, a cinco puntos de la Escuela de Fútbol Villaverde. Durante esta etapa del campeonato, los vallecanos han logrado sumar siete victorias, de las cuales cinco han sido en la Ciudad Deportiva y dos lejos de Vallecas; seis empates, repartidos tres y tres en partidos disputados como local y visitante; y seis derrotas de las cuáles tan solo una ocurrió en la Ciudad Deportiva ante el Móstoles URJC.
El filial, con 29 goles a favor, es el cuarto equipo más goleador de su grupo, sólo por detrás de las Rozas, el Getafe B y el DAV Santa Ana. Pero estos números contrastan con los goles en contra, pues el Rayo Vallecano B ha recibido un total de 28 goles tantos en su portería, algo que le hace ser el segundo equipo más goleado por detrás del San Agustín de Guadalix, penúltimo clasificado.
Contrastan mucho los números conseguidos como locales de los que han cosechado de visitantes. El filial, solo acumula una derrota como local, situando a la Ciudad Deportiva como un fortín para los vallecanos, y más tras la disputa de los partidos en el campo cinco. Pero estos números distan mucho de los cosechados fuera de Vallecas. El filial, tras la derrota ante el Getafe B, acumula seis encuentros consecutivos sin conocer la victoria fuera de casa. Una asignatura pendiente pues lejos de la Ciudad Deportiva solo han logrado vencer en dos ocasiones. El Rayo Vallecano B cosechó su peor derrota de la primera vuelta ante el Leganés B con un resultado de 6-2. El mejor resultado se consiguió en la visita a Pozuelo en dónde el filial superó al equipo por 1-4.
Cembranos y las rotaciones
Unas de las cosas que más destacan de la primera vuelta del campeonato del Rayo Vallecano B son las rotaciones que Luis Cembranos ha realizado durante la temporada. Pese a tener un equipo base, el técnico del filial ha dado oportunidades a todos los integrantes de la plantilla, participando como titulares en varios de los partidos.
Además, las bajas producidas por las lesiones, ha permitido que Cembranos pueda echar mano de los futbolistas del Juvenil A de Ángel Dongil. Sin ir más lejos, dos de ellos, Manu Navarro y Luis Aguado, han realizado toda la primera vuelta con el Rayo Vallecano B, asentándose en las alineaciones del técnico. No han sido los únicos, pues jugadores como Rubén de Tomás, Igor, Diego Campos y Juanpe.
Carrasco y Moreno, líderes en el terreno de juego
Si hay dos jugadores que han despuntado en la primera vuelta del Rayo Vallecano B esos son Adrián Carrasco y Sergio Moreno. El delantero, pese a la poca participación que ha tenido por sus convocatorias con el primer equipo, ha logrado anotar cinco goles, situándose como el segundo máximo goleador del equipo. El primero es Carrasco que, tras llegar la temporada pasada en el mercado de invierno, se ha colocado como un líder del equipo y ha logrado anotar nueve goles situándose como el máximo goleador del equipo y el cuarto de la categoría.
Un auténtico lujo de futbolistas que junto a jugadores como Pipe, Ángel Algobia, Javi Rubio, Martín o Kike, entre otros, apuntan a una generación de grandes promesas que el Rayo Vallecano deberá cuidar para mantenerlos en la entidad.
Peores números que la temporada pasada
A estas alturas de liga en la temporada pasada, el Rayo Vallecano B acumulaba 39 puntos, doce más de los que tiene actualmente. Una gran primera vuelta que, junto a los 35 puntos cosechados en la segunda, le permitió estar en los play-off de ascenso que acabó perdiendo ante el Ejea de los Caballeros. El filial además, terminaba la primera parte de la liga con 32 goles a favor y tan solo 15 en contra.
Sin duda, el Rayo Vallecano B tendrá que realizar una segunda vuelta casi perfecta si quiere lograr la clasificación a los play-off de ascenso a Segunda B. Un objetivo marcado al comienzo de la temporada y que supone un gran paso para estos futbolistas que aspiran a convertirse en profesionales en un futuro.