La llegada de Bebé a Vallecas generó una gran expectación entre los rayistas. Pero después, su rendimiento durante la temporada trajo consigo una gran controversia que a día de hoy continua latente en el Rayo Vallecano. Hasta el momento ha jugado más partidos saliendo desde el banquillo que partiendo desde el once inicial; y los datos indican que ha tenido una mayor determinación cuando actuó como suplente.
Revulsivo para Míchel
Desde su retorno en enero, Bebé ha disputado un total de diez partidos; tres como titular y siete como suplente. Sin embargo, si comparamos los encuentros en los que jugó desde inició y en los que salió desde la reserva, podemos observar grandes diferencias.
En los tres partidos como titular, el Rayo Vallecano acabó ganado ante el Almería (0-1), perdiendo contra el Sporting (1-0) y empatando frente al Cádiz (1-1). Es decir, un bagaje no muy convincente teniendo en cuenta la gran temporada del conjunto franjirrojo. En cambio, en los otros siete choques en los que salió desde el banquillo, el cuadro de Míchel cosechó seis victorias, un empate y ninguna derrota. El Rayo Vallecano está invicto en los partidos en los que Bebé salió a jugar como suplente. Unas estadísticas espectaculares.
Además, las veces que entró desde el banquillo, tuvo actuaciones determinantes. Sus apariciones más estelares fueron ante el Sevilla Atlético (2-0), donde el futbolista luso enganchó un derechazo inapelable a la escuadra que sirvió para sentenciar el encuentro y frente al Albacete (0-1), debido a su gran asistencia a Rdt para conseguir los tres puntos en los últimos instantes.
División de opiniones
El rendimiento de Bebé ha sido fruto de divisiones entre la afición vallecana. Una parte está satisfecha y la otra espera mucho más de él. En cualquier caso, los datos reflejan su buen hacer como ‘revulsivo’ y su aportación (sea menor o mayor) para la consecución del objetivo de retornar a la máxima categoría del fútbol español.