El Rayo-Alavés del sábado se disputó en el Estadio de Vallecas con altas temperaturas. De hecho, parte de la afición del Rayo Vallecano abandonó el recinto franjirrojo antes del final del partido fruto de las altas temperaturas.
Pero en la mañana de hoy, el calor también fue protagonista en la Ciudad Deportiva. La afición desplazada tuvo que soportar temperaturas de hasta 33 grados para presenciar al Rayo B y al Juvenil.
Sobre todo, fue en el encuentro del Juvenil A, que arrancó a las 13:30h, cuando más se padeció en la grada.
Además, hay que sumar el hecho de que la cafetería de la Ciudad Deportiva permanece cerrada desde hace más de un año, y la afición no puede pasar a refrigerarse.