En la nueva normalidad, hay cosas que siguen sin ser normales. Una de ellas es la forma de gestionar el once del Rayo Vallecano de Paco Jemez, que una vez más nos vuelve a sorprender, esta vez con Catena de por medio.
La falta de delanteros es un hecho, más cuando no puedes contar con Qasmi y Villar para el partido del Albacete. En la alineación antes de que comenzase el partido se veía una defensa de tres, con Álvaro y Andrés arriba. Con esa defensa abultada se intuía un control mayor sobre el Albacete.
Nadie vio venir la nueva faceta de Catena, que buscaba bajar balones largos. Oportunidades de gol ha tenido, casi todas de cabeza. Aunque el rendimiento del jugador como nueve no ha sido negativo, ha demostrado que no es su posición natural, sobre todo de cara a puerta.