“Un empate que sabe a poco”
El Juvenil A del Rayo Vallecano no pudo pasar del empate (1-1) ante el CF Peña de León en el partido correspondiente a la decimoséptima jornada de Liga de División de Honor Juvenil. Los de Michel fueron superiores a pesar de jugar con 10 futbolistas durante media hora. El gol rayista lo anotó Benito al comienzo de la segunda parte.
Arrancaba el partido con un Rayo bien plantado sobre el terreno de juego tratando de hacer daño por bandas a la defensa de tres que había instaurado Adrián Benavides, técnico visitante. Poco a poco, los pupilos de Michel iban tomando el mando del partido con toque rápido pero sin profundidad, mientras que el cuadro leonés lo intentaba a la contra. De hecho, en una de ellas llegaría la más clara de los primeros minutos para los visitantes, cuando un testarazo impecable de Sampedro se estrellaba contra el palo derecho de Montoya.
Primer aviso serio para los locales que verían como una falta inocente de José Ricardo al borde del área era ejecutada magistralmente por Manu, delantero del Peña de León, para establecer el 0-1 en el marcador. El potente disparo se coló con potencia en la red de la portería defendida por Montoya, quien no pudo atajar el esférico. Minuto 37 de partido y jarro de agua fría para los franjirrojos, unido a la correspondiente tarjeta amarilla para el central.
La segunda mitad comenzaba con un Rayo más agresivo. Yuya sustituyó a Filipe en el descanso, con la intención de dotar de más presencia al conjunto local en esa zona de tres cuartos de campo. El empuje local vería sus frutos solo dos minutos después, cuando un siempre activo Benito perforaba la meta rival para poner las tablas en el marcador. El 1-1 devolvía la ilusión al centenar de espectadores que se dieron cita en la fría tarde vallecana.
Pero llegó la jugada que marcaría el resto del choque. Con un Rayo Vallecano dominador, en una jugada embarullada en el área rival, José Ricardo intentaba una chilena. El colegiado entendió juego peligroso y amonestó al central franjirrojo, que veía la segunda amarilla y la consiguiente expulsión.
Desde ese momento, en lugar de venirse abajo los pupilos de Michel se hicieron todavía más fuertes y dominaron por completo el juego, llegando a tener varias ocasiones claras de gol para hacerse con la victoria, y lo estuvieron intentando hasta el pitido final.
Buen partido de los locales que no pudieron con el gol inicial del Peña de León en un partido que podía haber acercado a los rayistas a la zona alta de la clasificación.