El Rayo Vallecano volvió a quedarse sin marcar ante el Mirandés el pasado miércoles. Los franjirrojos no han marcados en dos partidos de los últimos cuarto disputados.
El conjunto de Andoni Iraola es un equipo con gol pero sobre todo en segunda línea. Los extremos, centrocampista, mediapunta e incluso los defensas aportan sus goles pero en la punta de ataque está siendo, una temporada más, el déficit del Rayo.
El técnico vasco no paró de pedir un delantero durante los últimos mercados pero los elegidos no han sido el delantero goleador. Los franjirrojos no tienen a su pichichi entre los máximos anotadores del campeonato e incluso el máximo artillero en Liga es un extremo: Isi Palazón.
Entre los cuatro puntas (Qasmi, Guerrero, Antoñín y Ulloa) el equipo suma nueve goles. Los de Vallecas han anotado 41 en Liga. Por lo que los delanteros del Rayo aportan el 22 por ciento de los goles del equipo. Unos pobres datos para ser, en teoría, los mayores responsables de hacer goles.
Ante el Mirandés Iraola volvió a rotar. El técnico vasco no encuentra a su delantero y cada dos o tres partidos rota en la punta de ataque.