Hacía 40 años que el Rayo Vallecano y el FC Barcelona no se enfrentaban en Copa del Rey. El Rayo solo había conseguido ganar al equipo culé tres veces en Vallecas, la última en 2002. Además, el día del partido se cumplieron seis años de la muerte de Wilfred y se produjo un minuto de silencio en memoria de Gregorio Llorente, el creador de la peña más antigua del Rayo. Al ser octavos de final, volvía el VAR a la Copa y una pancarta contra Presa se colgó en los aledaños del estadio antes del partido.
El Rayo debido a las bajas por lesión y COVID salía con un 4-4-2. Como detalle, Fran García jugaba de extremo. Además, Iraola había jugado tres finales de Copa ante el Barcelona, pero había perdido las tres. El míster vasco llegó el año pasado a semifinales eliminando a tres primeras: Celta, Sevilla y Villarreal.
En el minuto 1 llegó el primer detalle del partido, Trejo se iba de dos rivales con una ruleta. Iraola corregía la posición de Comesaña y de Joni. El Barcelona, que vestía de rosa, pidió penalti a los siete minutos de partido, pero Catena tocó balón. Como curiosidad, el central de Mósteles llevaba ‘Marugán’, en su camiseta, el apellido de su madre ya que el 28 de enero es su cumpleaños. En el minuto 10 llegó la primera amarilla del partido, a Comesaña, tuvo que ser atendido por un golpe en la nariz. En esa falta llegó la primera ocasión del Barcelona, pero Dimitrievski, vestía todo de negro, estuvo atento.
En el minuto 16 llegó el primer córner del Rayo, probando el trenecito. El Rayo, 2º mejor equipo de Segunda a balón parado y Catena, central español más alto de Segunda, era la principal baza para hacer daño al Barcelona. En el minuto 19 llegó el primer palo para el Barcelona, De Jong, y en el 35’ llegó el segundo palo, el tiro de Riqui lo desvió lo justo Iván Martos para que el balón tocara en el larguero.
Dos minutos después, en el 37’, el árbitro expulsó a Miguel Fernández, readaptador de lesiones del Rayo por protestar. Además, antes del descanso el Barcelona pidió otro posible penalti, de Fran García a Trincão. Saveljich nos dejó una imagen para el recuerdo, robando el balón y frenando a Messi y el Rayo se fue al descanso con solo un 30% de posesión, pero con el 0-0 en el marcador.
Nada más empezar la segunda parte, en el minuto 47, Messi tuvo el tercer palo para el Barcelona en un disparo de falta directa. Y en los primeros diez minutos de la segunda mitad, el equipo culé había creado peligro con tres balones largos a la espalda de la defensa rayista.
Iraola cabreado con sus jugadores metió a Álvaro García por Joni en el minuto 56, el extremo no decepcionó. Tras un pase de Trejo, el gaditano regateó a Lenglet dentro del área y probó a Neto, el rechace del brasileño le cayó a Fran García que solo tuvo que empujarla, primer gol del jugador cedido por el Madrid. Tras el gol Fran García y Álvaro se cambiaron las bandas jugando Fran de extremo derecho.
El Rayo creía y el partido hubiera cambiado mucho si hubiera habido público. Un minuto después del gol, el VAR anuló un gol al Barcelona y en el minuto 66, Koeman hizo un triple cambio: Dembelé, Jordi Alba y Pedri. La calidad del Barcelona se impuso al Rayo. Primero en el 69’, gol de Messi y luego en el minuto 80, gol de De Jong. Además, Messi pudo marcar el tercero tras regatear a Dimitrievski y Fran García dentro del área. Como detalle, el equipo culé contaba con Araujo, el central llevaba 10 partidos sin que le regatearan y de los 16 partidos que ha jugado, el Barcelona no ha perdido.
A falta de público, los gritos de los jugadores del banquillo rayista, animaban a su equipo. Y aunque el Rayo tuvo la última en una falta en la que hasta Dimitrievski subió a rematar, el partido acabó 1-2 y el Rayo, por segundo año consecutivo, cayó en octavos. Pero con la cabeza bien alta y tras haber vuelto a plantarle cara a los grandes.