“Las finales no se juegan, se ganan”
La victoria del conjunto de Toni Paredes no fue una más. El Juvenil “B”, asaltó la casa del actual líder (el Real Madrid), colocándose así 2º en el grupo 12 de esta Liga Nacional, a solo 3 puntos de los blancos pero con el “golaverage” a favor. Los goles de David Dorado y José Matos, valieron para que este duelo en la cumbre se decantara hacia el lado de los vallecanos.
Más que un partido
Mucho más que un partido, porque visitar Valdebebas y medirse a un rival de talla mundial como el Real Madrid, nunca es fácil. Dos de las mejores canteras españolas de fútbol, midiéndose en el terreno de juego con una Liga Nacional de por medio, es simplemente poesía para aquellos que disfrutan del deporte rey.
Ambos conjuntos salieron los instantes iniciales con muchísimo respeto, probablemente teniendo en mente que un error por falta de concentración, podría costar el trabajo de toda la temporada. Con el paso de los minutos, los blancos fueron haciéndose con el control del balón, pero la falta de profundidad del conjunto de Álvaro Benito, les daba el chance a los franjirrojos para salir rápido en transición.
La velocidad de los Álvaros, Cano y Dorado, estaba siendo un verdadero quebradero de cabeza para la zaga blanca, por lo que empezaron a llegar los primero acercamientos al área. Fue en una de estos acercamientos, concretamente a balón parado, dónde quizás se decidió gran parte del encuentro. Córner a favor del conjunto vallecano, salida rápida del Real Madrid y jugada de dos para uno en el área vallecana, que se salda con un paradón tremendo de Miguel Ángel Morro a Iván Riveiro.
El partido estaba siendo un verdadero duelo de “tú a tú” por lo que el Rayo Vallecano no tardó en contestar. Recuperación en 3/4 de campo, balón al espacio para Dorado y fallo clamoroso en la definición del atacante vallecano, que no consigue mandar el balón entre los tres palos.
Vellos de punta
La segunda parte siguió la línea de la primera, con la diferencia de que ambos equipos se estiraron en busca del gol y empezaron a hacer el partido mucho más vistoso. Sin embargo, los duelos tan ajustados se deciden por detalles y los vallecanos aprovecharon las jugadas a balón parado para hacer daño a los blancos.
Así fue como llegó el primero de los de Paredes. Dorado la pone desde la esquina, el servicio se envenena y gracias a la ayuda de un defensor blanco, el balón acaba dentro de las redes. La locura llegaba a Valdebebas en forma de gol del Rayo, pero quedaba mucho partido por delante para dar a todo un Real Madrid por muerto.
Los franjirrojos empezaron a cerrar filas entorno a su portería, estos se sentían cómodos sin balón y los merengues no eran capaces de encontrar ese último pase que les dejase delante de la meta vallecana. Cuando peor lo pasaba el Rayo, llegó la sentencia de José, en una jugada más propia de un delantero que de un defensor.
Dorado vuelve a servir y tras una serie de rechaces dentro del área, el balón le cae a José que se revuelve con una calidad técnica impresionante, para poner distancia en el marcador, sentenciando de esa manera un gran choque por parte de ambos equipos.
Mención a parte merece, la gran competición que están realizando los chicos de Toni Paredes. Muchas veces se infravalora la cantera del Rayo Vallecano, pero es una de las mejores creadoras de futbolistas de todo el mundo, no porque yo lo diga… Los resultados están ahí.