Tras la marcha de alguna de las figuras clave del Rayo Femenino, como es el caso de la entrenadora Irene Ferreras o las jugadoras Marta Perarnau o Ana Vallés, entre otras, el cuadro de la franja tiene ante sí una de las temporadas más ilusionantes de los últimos años.
El pasado 1 de agosto se puso de largo el nuevo proyecto de Liga que ha propuesto la RFEF. La Primera Iberdrola, que sigue el modelo que propuso la patronal del fútbol, se ha presentado en medio de una gran expectación.
Se reprodujo un pequeño vídeo como parte de la introducción de los participantes en la primera temporada de la Liga. Entre ellos estaba y destacaba el Rayo Vallecano, que poco a poco, se ha hecho un hueco entre los mejores equipos de España y tiene en esta temporada que empieza el 8 de septiembre uno de sus retos más apasionantes.
Ese desafío se trata ni más ni menos de reconstruirse, de hacer un nuevo proyecto, que se aleja de lo hecho hasta ahora, pero sin perder los matices que han caracterizado al equipo de la franja. Hay que tener en cuenta que las bajas que sufrieron y que el propio conjunto del barrio de Vallecas anunció nada más concluir influyen de forma fundamental.
Empezando por el banquillo. Irene Ferreras, que pudo establecer a lo largo de las últimas temporadas su manera de entender el juego, y mejor aún, lo pudo aplicar, dejó el cargo para marcharse a otro de los equipos punteros de la Primera Iberdrola, el Valencia. La ex-guardameta, entre otros equipos, del Rayo y el Atlético, puso rumbo a la ciudad del Turia tras salvar al cuadro de su vida.
En su lugar, llega una técnica de lo más experimentada. Se trata de Jessica Rodríguez, que ha entrenado en países como Japón, Dinamarca y Estados Unidos, que además también jugó en España, tanto en el RCD Espanyol como en el FC Barcelona, los dos grandes rivales de la Ciudad Condal.
Y no ha venido sola, ya que el equipo madrileño ha hecho algunos fichajes de calidad. Este es el caso de Patricia Larqué, que viene del Zaragoza, ya conoce la Liga y es una adquisición de quilates para la portería. Tras una temporada en el Santa Teresa de Badajoz, volvió al equipo maño, donde estuvo toda su carrera, para seguir un año más y poner rumbo a la capital de España.
Por otra parte, en la delantera también ha llegado un refuerzo que puede dar un salto de calidad al equipo dirigido por Rodríguez. Se trata de la ex del Ferencvaros húngaro Sladjana Bulatovic. La internacional por Montenegro llega desde Albacete, donde jugó la pasada temporada 25 encuentros y anotó 4 goles. Mientras, en Hungría, salía a casi gol por partido, ya que anotó 81 tantos en 80 compromisos.
Otra de las incorporaciones proviene del mercado nacional. Es el caso de Saray, que procede del Logroño, y el mercado del Rayo en cuanto a las altas se cierra con Priscila Okyere, que viene del Subotica.
Pero si hay buenas noticias en cuanto a los fichajes que de forma gradual se están realizando, la parte mala o menos buena, valga la redundancia, viene en cuanto a las bajas. Empezando por Marta Perarnau, que deja el club tras 11 años, 11 que se dice pronto. La catalana ha estado prácticamente en todas las categorías del Rayo, con el que ha jugado una gran cantidad de partidos y es una de las históricas en Vallecas.
La legión de bajas ha sido muy importante. Además de Perarnau, se marchan entre otras Ana Vallés, que se va al Tacón, Raquel Carreño, Inma Martínez, Mendi, Jelena, Emma Marqués, Naima, que se va al Zaragoza, Raquel Candelas, que pone rumbo al Pozuelo, y es un capítulo que no está cerrado.
El resto de la plantilla está renovado, entre las que destaca Sheila, que es una de las piedras para seguir creciendo, como Eva Alonso, Iris, Altuve, Auñón, Ángeles o Yael Oviedo, que fue una de las grandes incorporaciones de la pasada temporada, y que en los meses que lleva en Vallecas ha convencido.
Y llega el momento del calendario. Los aficionados rayistas que no hayan podido ver el calendario se preguntarán: ¿contra quién empieza el equipo?. Se lo resolvemos. El Rayo empieza una de las temporadas más emocionantes y con incógnitas ante el Logroño el próximo 8 de septiembre.
Falta poco para empezar el año, pero todos están ya con sus espadas en alto, y el Rayo Vallecano no quiere quedarse atrás. El crecimiento que han experimentado en las últimas temporadas no debe frenarse.