La jugadora del Rayo Vallecano Femenino, María Bores, apenas lleva tres meses en el club, pero parece que lleva toda la vida. Llegó este verano procedente del Sevilla y no le está pesando la responsabilidad de sustituir a Cristina Auñón, la excapitana. Se ha convertido en indiscutible y está volviendo a disfrutar jugando al fútbol. Solo piensa en seguir creciendo como jugadora y ganarle al Villarreal este fin de semana.
#EntrevistaUR a María Bores
¡Muchas felicidades! El miércoles cumpliste 24 años ¿qué tal cómo estás?
Bien, todo bien. Muchas gracias por la felicitación.
En el partido frente al Athletic Club se lesionó Camila Sáez ¿cómo viviste ese momento?
A mí me pilló un poco lejos, pero fue impactante porque cayó mal en el suelo después del choque y cuando me dio tiempo a llegar, ya había un montón de sangre. Vi poco porque estaban el resto de compañeras ayudándola y tapándola. Primero le dieron un pantalón a Pilar para intentar taparlo lo antes posible. Yo en cuanto vi sangre me alejé porque si no tenemos mucha ayuda, ya para que tuvieran que atender a mí también.
Tú estabas en la banda contraria ¿no?
Sí. Yo solo vi el salto. La compañera del Athletic fue más en la zona lateral de la cabeza y es que a Camila le dio en el medio de la frente. Entonces, la brecha fue profunda y sangró un montón.
¿Has podido hablar con ella? ¿qué tal cómo está?
Sí. El lunes estuvo descansando porque la dijeron que tenía que guardar reposo, pero el miércoles vino al entrenamiento. Ella está bien, con ganas de volver, pero si que es verdad que tiene que tener cuidado porque no deja de ser un golpe en la cabeza y hay que tener cuidado con esas cosas.
Hablando ya del partido, ¿qué crees que os faltó frente al Athletic Club para por lo menos conseguir el empate?
El equipo está bien. Siempre entramos al campo queriendo llevarnos los tres puntos. Es verdad que el fútbol son dinámicas y tenemos que salir de ella como sea. Tenemos que conseguir meter gol y distanciarnos un poco de siempre estar en el empate (0-0) o (1-0), porque al final eso mentalmente acaba haciéndonos daño. Tenemos que conseguir hacer más goles, oportunidades tenemos, llegamos un montón de veces a portería, pero a veces, no quiere entrar el balón. Hay que poner de nuestra parte para ir con fe de que tiene que llegar el balón y que nos llegará la oportunidad.
Precisamente este fin de semana tenéis una oportunidad importantísima frente al Villarreal que está también ahí abajo ¿es un partido clave?
Sí. Obviamente el Villarreal está ahí abajo con nosotras. Es un partido que tenemos que ganar sí o sí y distanciarnos de la zona baja como sea. Es un buen partido para dar un golpe sobre la mesa y demostrar que aunque estamos en una mala dinámica, podemos salir de ella. Tenemos muchísimas cosas buenas como equipo, que tenemos que sacar a relucir, todavía nos cuesta que se nos vean, pero creo que es un buen partido para demostrar que tenemos otras cosas que nos hacen especiales.
¿Cuál crees que es eso que os hace especiales como equipo?
Tenemos un equipo de jugadoras muy bueno, muy humano, de ayudar a la compañera. Creo que tenemos esa garra, esa lucha que nos caracteriza de no bajar los brazos, de seguir compitiendo, de seguir peleando, de ayudar a la compañera cuando no está bien o hay un mal pase. Cualquier detalle está la compañera para rectificarlo, para ayudarnos y eso no se ve en todos los equipos. Este equipo aparte de tener calidad como jugadoras, nos ayudamos y vamos todas a una.
“Tenemos esa garra, esa lucha de no bajar los brazos y aparte de tener calidad como jugadoras, nos ayudamos y vamos todas a una”
¿Por qué te decantaste por el Rayo?
En el momento en el que el Rayo me llamó, no me lo pensé dos veces. Al final era volver a casa, a mi ciudad, con mi familia y con mi gente. Después de llevar tanto tiempo fuera de casa, que mejor que volver a Madrid en un club como es el Rayo que se caracteriza por esa lucha, por estar siempre ahí pelando. Luego encima por el grupo de jugadoras, por el cuerpo técnico que iba a haber, era una oportunidad increíble.
¿Qué tal te ha acogido el vestuario y el cuerpo técnico?
¡Genial! Desde el primer día me abrieron los brazos y estaban ahí para acogerme de la mejor manera. Tanto jugadoras como cuerpo técnico. Desde el primer momento hicimos muy buen grupo, muy buena piña. Nos ayudamos unas a otras y es lo que caracteriza a un buen equipo, que todas nos ayudamos, que todas estamos pendientes de lo que le pase a la compañera. La unión y el conjunto da un plus al equipo. A lo mejor no se está viendo en este inicio de temporada, pero estoy segura de que vamos a demostrar grandes cosas.
¿Crees que la unión del equipo es la clave para ir saliendo de las situaciones negativas que os rodean?
Creo que sí. Al final, cuando tú entras en una dinámica mala, de no ganar, de no sacar puntos, lo más importante es la mentalidad que tengas en ese momento. Aparte de todo lo que conlleva el fútbol, el jugar bien y hacer gol, que lo necesitamos también. Es muy importante el tener la cabeza fría, saber en qué situación estamos y no bajar los brazos. Simplemente resetear, empezar de cero y centrarnos en el partido y darlo todo. Es verdad que partido al que salimos, lo intentamos dar todo y al final, la victoria llegará, como llegó frente al Sevilla, tiene que llegar más de seguido.
Estás sustituyendo a Cristina Auñón, la excapitana del club ¿has podido hablar con ella? ¿hay responsabilidad de sustituirla?
No tuve el placer de hablar con ella, me hubiese gustado, pero desde el primer día me siento con mucha responsabilidad. Al final, Cristina Auñón era un pilar fundamental para el equipo, para las jugadoras también, no deja de ser una de las grandes capitanas. Para mí es una responsabilidad muy grande, tengo que cumplir las expectativas tanto de mis compañeras como de la afición. Ella ha dejado el listón alto y ojalá poder demostrar que estoy a la altura.
“Para mí es una responsabilidad muy grande sustituir a Cristina Auñón, tengo que cumplir las expectativas de mis compañeras y de la afición”
¿Te ha impresionado mucho la afición del Rayo Vallecano?
Pues sí. Me habían hablado muy bien. La afición del Rayo va a muerte con las jugadoras y vivirlo de cerca me ha impresionado aun más. Porque se nota la cercanía, el apoyo, el estar siempre con nosotras. Es una afición que no critica, que apoya y es algo que como jugador todo el mundo querría tener. Nos sentimos muy bien con nuestra afición, siempre están ahí y solo tengo palabras de agradecimiento.
Has jugado todos los partidos de titular esta temporada y tan solo te has perdido 23 minutos de juego ¿cómo te estás sintiendo?
¡Muy bien! Después del último año que jugué en Sevilla, pude disputar pocos minutos y el volver a sentirme futbolista, porque al final todo el mundo quiere jugar. El volver a disfrutar jugando al fútbol, el volver a competir lo necesitaba tanto físicamente como mentalmente y me estoy sintiendo genial. Estoy disfrutando en el campo que era lo que más falta me hacía.
Estás jugando de lateral derecho, pero también puedes jugar por la izquierda ¿en qué lado te sientes más cómoda?
Me siendo cómoda en ambas bandas. Una temporada tuve que amoldarme a ese lateral izquierdo para poder seguir jugando y al final, yo soy una jugadora que quiero disfrutar en el campo. Me da igual en la posición en la que me pongan, pero me siento más cómoda en la derecha. Mi pierna hábil es la diestra, y me gusta más subir por la banda que meterme por dentro, entonces, disfruto más en la derecha, pero si me tienen que poner en la izquierda, de central o en el medio, voy a competir igual.
Tu gran inicio de temporada te ha hecho ser la mejor jugadora del Rayo en el mes de octubre ¿qué significa eso para ti?
Significa mucho. El año pasado no pasé un gran año y sí que es verdad que mis ideas no optaban por estar ahí. El tener ese reconocimiento a ese trabajo, a todo el mundo le gustaría. Yo cuando lo vi, no me lo creía. En mi equipo hay jugadoras muy buenas y no me esperaba estar ahí. Simplemente dar las gracias a todas esas personas que lo han hecho posible.
Fuiste internacional sub19 y sub20 con España, ¿qué recuerdos tienes con la selección española?
Todos los recuerdos que tengo son increíbles, súper bonitos. Algunos todavía me siguen emocionando como cuando escuché por primera vez el himno. Para mí fue algo impactante, súper bonito, que no voy a olvidar nunca. Además de el grupo que hicimos tanto para el europeo como para el Mundial. He compartido vestuario con gente increíble como Mariona, Aitana, Nahikari, Andrea Falcón o Maite Oroz, que son jugadoras que están demostrando su potencial ahora mismo. Disfruté de esa etapa y va a estar siempre conmigo.
¿Qué retos te pones a nivel personal este año?
A nivel personal me propongo seguir creciendo como jugadora, como persona, ayudar en todo lo que pueda al equipo porque siento que nos merecemos mejores resultados, nos merecemos mucho más y voy a hacer todo lo posible para que consigamos salir de ahí.