El exentrenador del Rayo Vallecano, Míchel, tiene un bonito reto por delante para cerrar esta temporada 2021-2022. El Girona afronta su tercer playoff consecutivo, sin fortuna en los anteriores, y el técnico madrileño podría romper esta racha.
Tras el partido ante el Eibar, este mostró su felicidad en rueda de prensa: “Para conseguir un resultado positivo aquí hay que sufrir y hoy hemos sabido hacerlo. Y además hemos sido muy competitivos y muy serios en defensa esperando nuestra oportunidad“.
Además, este podría conseguir su tercer ascenso desde que comenzó en los banquillos. La final arrancará el próximo sábado día 11 con el partido de ida, mientras que una semana después, el domingo 19, se disputará el partido de vuelta. El equipo que salga vencedor será el que acompañe a Almería y Valladolid a Primera división
Míchel comenzó como entrenador en el Juvenil A del Rayo Vallecano en la temporada 2016-2017. Ese mismo año cogería el primer equipo rayista tras el cese de Rubén Baraja. En Vallecas logró un ascenso y estuvo hasta el año 2019 cuando fue destituido tras ser colista de Primera División.
A la temporada siguiente cogió el reto del Huesca con el que logró un nuevo ascenso. La campaña pasada, al igual que le ocurrió con el Rayo, fue cesado como técnico del equipo oscense en Primera.