El ambiente del vestuario del Rayo Vallecano ha sido bueno durante toda la temporada; pero esta semana, tras el ascenso del equipo a Primera División, es excelente. Las cenas, actos, visitas e incluso algo de fiesta han hecho que la convivencia sea más intenta en los últimos días en la plantilla franjirroja.
Hoy este buen rollo lo ha ‘padecido’ Antonio Amaya. El capitán, en su 35 cumpleaños, ha recibido las felicitaciones de sus compañeros con varias bromas particulares incluídas.
Una de ellas ha sido con un extintor de la Ciudad Deportiva. El jugador rayista ‘ha sufrido’ como sus compañeros le rociaban con un extintor dentro del vestuario. Como es habitual, la idea fue originada por los ‘argentinos’, concretamente Óscar Trejo y Emiliano Armenteros.
Los jugadores están viviendo sus últimos días juntos ya que el equipo se despedirá tras el partido ante el Nástic tras más de 10 meses juntos.