El Rayo Vallecano Juvenil A cayó derrotado ante el Leganés por 2-1 en su visita a la Ciudad Deportiva de Butarque. Un gol de Cano puso el empate a falta de quince minutos, pero los blanquiazules, con uno menos, se llevaron el partido.
Falta de creatividad
Los de Dongil salieron al terreno de juego del bien cuidado césped de la Ciudad Deportiva de Butarque, un tapete cuidado y en perfectas condiciones, con la intención de afianzarse en la tercera posición en Liga. El único objetivo que planea por la cabeza de este grupo es la Copa del Rey, ese tercer lugar, sabedores de la imposibilidad aritmética de alcanzar a los dos titanes de la competición: Atlético y Real Madrid.
Con ello arrancó el choque en territorio pepinero, en una primera parte con muy poca salsa. El ritmo bajo de juego y la saturación que brotaba del centro del campo, eran rotos por momentos por banda izquierda, donde Álex Cano y Igor trataban de desquebrajar la buena defensa local.
Las ocasiones de gol se contaban con los dedos de una mano, pero poco a poco, el encuentro fue entrando en una segunda marcha: los pepineros se encontraron con un gol a balón parado antes en el minuto 32. Sin apenas inquietar la portería del bien plantado Morro, los blanquiazules se ponían por delante en el marcador.
Dominio rayista sin definición
Dongil quería darle una vuelta de tuerca al encuentro, así que comenzó a introducir cambios: quería el partido. Salió Molina por Igor nada más arrancar la segunda mitad, con un claro mensaje ofensivo. El propio Molina tuvo en sus botas el gol en varias ocasiones.
Sin duda, uno de los puntos de inflexión del choque fue la expulsión de Aymane. El centrocampista pepinero vio la segunda cartulina amarilla y dejó a su equipo con uno menos a falta de más de 20 minutos por disputarse. Esto lo aprovechó el Rayo que metió una marcha más y logró la igualada por medio del pichichi Álex Cano. El delantero se encontró con un balón en el área y se encargó de perforar la portería de Alfonso. Era el empate a uno, y la sensación que reinaba en el ambiente era de remontada visitante.
Tal y como le pasó al primer equipo contra el Leganés, también con uno más y también en el último tramo del choque, los blanquiazules se pusieron por delante. El dominio y las ocasiones eran del Rayo, y el gol parecía cuestión de tiempo. Pero cuando los de Dongil buscaban el gol de la victoria, el Lega, en una jugada aislada, se llevó los tres puntos con un tanto en minuto 89 gracias a un gol de Clave.
Con este resultado el Juvenil A cosecha su segunda derrota consecutiva fuera de casa. Los de Dongil seguirán luchando por estar en Copa a falta de cuatro jornada.