Se sufre,si. Estás trabajando en un súper,es domingo y tu Rayo juega a 300 metros de casa. No puedes ver qué ocurre, ni saberlo y te reconcome por dentro. Cuando te convences de que lo verás sin spoiler,en casa y de madrugada llega un cliente y te dice que qué mala suerte,que lo hemos vuelto a tener en la mano y que vaya equipo ese amarillo de marca Hacen… mejor no hacer publicidad que son la competencia (en todos los sentidos) .
El hecho es que cuando he podido al fin verlo me he dado cuenta de que ha sido como un dia en el súper. Primero hubo un silencio sepulcral (el rayismo te quiere, Jorge), nada oficial.Luego el ambiente empezó frio hasta que los clientes aparecieron y llegó a la caja un producto en LANZAMIENTO que batió al producto NOVEDAD.
El gol de Samu,¿qué tendrán estos de amarillo con los Samus?, obligó a los de la franja a hacer lo mismo que yo con la tienda vacía, reponerse, y cuando se veían huecos en las estanterías apareció nuestro producto ESTRELLA Raúl de Tomás para empatar el choque antes del descanso u hora del bocata.
De vuelta, aquello se convirtió en un devenir de clientes preguntando por la portería (calidad/precio,lo mejor del fútbol) hasta que alguien la encontró en lo que parecía un producto VENCEDOR. Otra vez Álvaro García,atento al rechace de Asenjo ,salía y marcaba a la primera. Empezábamos a ver cerca al fin la victoria, pero Sansone entró como producto GANCHO y a él se agarró el Villarreal para empatar cruzando el balón y nuestra cara como un bofetón de realidad en plan hoja de reclamación.
Se vieron movimientos sospechosos y el vigilante miró las cámaras de vez en cuando, pero esta vez no hubo nada que lamentar con el VAR.
Pudo redimirse Abdou con una ocasión postrera,pero su remate fue un producto PERDEDOR y la grada se fue a casa con un Ba.
El empate no sabe a nada,tiene el regusto de haber visto a dos equipos que tienen un buen envase pero que no pasan de ser marcas blancas.