El técnico del Rayo Vallecano analizó la actualidad del equipo en una entrevista al Diario Marca, en la que habla de su situación, del partido ante el Betis o de las sensaciones que está destilando su equipo en los meses de competición en Primera División.
Sensaciones
Una de las respuestas más habituales de Míchel en sus ruedas de prensa está relacionada con las sensaciones que está mostrando el equipo. El técnico franjirrojo tiene claro que después del partido contra el Leganés, la idea es seguir con esa dinámica “en cuanto al juego, la presión, la intensidad y el ritmo“. Pero una de las cosas que más preocupa al técnico es la defensa: “necesitamos esa solvencia defensiva pero siendo más alegres en ataque y más cercanos a lo que hicimos frente al Leganés“.
Más en profundidad, Míchel confiesa que “esas irregularidades” las están trabajando desde la mentalidad: “No podemos ser un equipo que haga una primera parte espectacular y la segunda irregular, como frente al Espanyol. Las dudas que nos genera un centro lateral o una situación que el rival puede aprovechar… eso nos hace tener desconexiones y minutos malos. Yo creo que todos los equipos tiene momentos malos pero a nosotros ahí nos han hecho mucho daño. Eso es lo que hay que corregir“.
En cuanto al Betis, Míchel espera que “la posesión sea de ellos”. “Vamos a intentar que no pero, lo normal, es que nos puedan quitar el balón como han hecho ante todos los rivales. Hay que trabajar muy bien cómo recuperar y cómo hacerles daño”, explica.
Apoyo de la afición
A pesar de los resultados, el técnico siente el apoyo de la grada: “agradezco el cariño y la confianza que han depositado en mí, yo creo que el fútbol hay que vivirlo desde la pasión, el compromiso y el sentimiento de pertenencia. Eso para mí es clave. Yo no hago nada que crea que vaya a ser malo para el Rayo Vallecano“, reflexiona.
“Las cosas pueden salir mal y un entrenador puede ser cesado, claro que sí. Pero si es una apuesta del club y se cree firmemente en algo, creo que hay que seguir por el mismo camino. Yo creo que conmigo los resultados van a ser mejores, pero también entiendo que otros piensen que no”, añade.
Ante la pregunta de si se hubiese sentido dolido si le hubiesen destituido, Míchel lo tiene claro: “Hubiese pensado que lo podía haber solucionado. La semana que viene voy a pensar lo mismo, y la otra también. No me hubiese dolido porque entiendo las circunstancias y lo que puede pasar con los entrenadores. Hubiese pensado que dentro de este proyecto soy la persona idónea pero hay otros que piensan que no. Pero no estaba preocupado por mi situación de verdad que no. Estoy preocupado por la situación del Rayo en la tabla y estoy convencido de que el Rayo se va a salvar”.