Decir que el Rayo está con el agua al cuello en la jornada 10 podría parecer exagerado, sin embargo la situación del equipo es la que es: penúltimos con 6 puntos y una única victoria en 9 partidos. Que Míchel está cuestionado es indudable y que el equipo está bajo de confianza es un hecho. Lo positivo: que la afición muestra su apoyo cada día a sus jugadores y a su entrenador y que ahora toca Girona, posiblemente el mejor rival posible si se miran los números.
Rivales habituales y conocidos durante las andaduras de ambos conjuntos en Segunda División, el club gerundense es un contrario que se le da muy bien a los franjirrojos. Se han enfrentado 8 veces con un balance muy favorable a los madrileños: 4 victorias, 3 empates y una única derrota en que además fue en Vallecas. Destacable que en los últimos cuatro enfrentamientos directos (temporada 2010-2011 y 2016 y 2017) los duelos siempre se han saldado con victoria rayista.
En la última visita a Montilivi, el 1 de abril de 2017, con Míchel ocupando ya el banquillo rayista, sus chicos ganaron 1-3 con goles de Trashorras, Javi Guerra y uno que posiblemente mañana salga de inicio: Santi Comesaña. De aquel equipo siguen militando en el Rayo el propio Comesaña y Álex Moreno, que visita su tierra (ambos se postulan como titulares), además de Dorado y Javi Guerra (los dos fuera de la lista por decisión técnica).
La única derrota ante el Girona fue gracias a un 0-3 en el estadio de Vallecas (13 de febrero de 2010) con un auténtico partidazo del por entonces meta gerundense Albert Jorquera. Los tres empates constan de la época más lejana, en los años 2008 y 2009.