En el minuto 76 del partido, el Rayo Vallecano buscaba el segundo tanto que le permitiese alejarse en el marcador. En un centro raso de Saúl, Emerson cortaba ese balón desde el suelo, ayudandose con los brazos.
El árbito, De Burgos Bengoetxea, reconocía que había visto el balón impactando en su brazo. Aún así, no señaló penalti, alegando que no lo hace de forma intencionada, ya que el jugador del Betis está tendido sobre el césped cuando ese balón choca con su brazo.
Recordemos que en esta ronda de la eliminatoria de la Copa del Rey no está disponible el VAR. Es por eso que la jugada no pudo ser revisada. Quizá, si el árbitro hubiese señalado penalti el transcurrir del partido habría sido otro al que hemos vivido.