Para ganar en esto del fútbol hay que sufrir y sudar… y eso es precisamente lo que hicieron los chicos de Ángel Dongil para acabar derrotando 1-2 al Rayo Majadahonda. A las cuatro de la tarde y bajo un sol de justicia, el Juvenil A no supo cerrar un partido que a priori tenía dominado y acabó sufriendo para sumar los 3 puntos después de dos partidos sin conocer la victoria.
Muy metidos empezaron los rayistas, con intensidad y las ideas claras. El Rayo Majadahonda, antepenúltimo y sin conocer la victoria, acusó el fuerte inicio franjirrojo y las ocasiones de los de Vallecas llegaban. Especialmente inicisivos los extremos: Rubén de Tomás y sobre todo Álvaro Aguirre. El 7 fue el mejor del partido y fue un continuo dolor de cabeza para la defensa local.
El dominio franjirrojo era claro y el gol no tardó en llegar. En el minuto 20, Aguirre volvía a irse de su rival con un sombrero espectacular al primer toque y dejaba solo a Cano ante el guardameta. El ariete no perdonó y definió con calidad y claridad para adelantar a los suyos. El Rayo Majadahonda sintió el golpe y los de Dongil lo notaron, que se lanzaron a por el segundo. Nico, portero del conjunto majariego, evitó que su equipo se fuera sin vida al descanso. Sin embargo, la valentía suele tener recompensa y en este caso se cumplió la premisa. Otra vez entrando por banda, esta vez por izquierda, Chumi disparó y su rechace le cayó a Simal para rematar a placer.
La superioridad rayista era clara, pero en una jugada individual del extremo majariego Marcos Bravo (el mejor de los suyos) Jorge cometía penalti claro. El propio Marcos lo transformó engañando a Miguel Morro y metiendo de lleno en el encuentro a los suyos junto antes del descanso.
A la vuelta de los vestuarios, el Rayo Majadahonda dio un paso adelante y se fue a por el empate. Con más espacio para correr, los delanteros rayistas pudieron matar el partido, pero no estuvieron acertados en los metros finales. Los locales fueron cogiendo confianza y en los últimos 15 minutos cercaron la portería de Morro, seguro en las salidas por alto ante los balones colgados y las jugadas a balón parado del rival. No sin algún susto y barullo dentro del área, el filial vallecano resistió para sumar 3 puntos importantísimos tras el la derrota ante el Atlético y el empate en casa contra el Alcorcón. Ahora, a buscar la buena dinámica y seguir sumando para estar arriba, que es el claro objetivo del filial rayista.