La canterana del Rayo Vallecano Femenino, Mónica Braojos, se ha asentado en el primer equipo con 24 años y a base de trabajar en la sombra. La mediocentro ha sido titular en cuatro de los seis partidos esta temporada y frente al AEM realizó una gran actuación como central.
Muchas veces el único camino para cumplir tus objetivos es trabajar, tener paciencia y esperar tu momento, y sino que se lo digan a Mónica Braojos. Tras ocho años en la cantera del Atlético de Madrid, donde incluso llegó a ser capitana del Atleti C, en diciembre de 2018 y con apenas 20 años llegó al Rayo Femenino B con la firme intención de seguir creciendo, hacerse un hueco y poder debutar algún día con el primer equipo.
Tan solo tuvo que esperar un año y dos meses para poder hacer su debut con las mayores. Fue el 16 de febrero de 2020 en la Ciudad Deportiva ante el Deportivo, un día que nunca olvidará. La toledana salió en el minuto 96 en el lugar de la argentina Yael Oviedo. Apenas pudo participar, pero sí vio sobre el césped la victoria del Rayo ante el conjunto gallego y sobre todo, pudo cumplir su sueño de debutar en la élite del fútbol femenino español.
“Espero que no sea la única vez que pueda disfrutar de esto, al fin y al cabo esto es por lo que trabajamos y nos esforzamos día a día”, afirmó tras el partido. Aunque a partir de ese día le tocó trabajar aun más duro. A base de paciencia se hizo clave en el centro del campo del filial franjirrojo. La temporada pasada anotó cuatro goles y portó en alguna ocasión el brazalete de capitana. Tras el descenso del Rayo Femenino se le abrieron las puertas del primer equipo gracias a sus buenas cualidades.
En este inicio de temporada y a sus 24 años está siendo una jugadora importante dentro de la rotación. Ha disputado de titular cuatro de los seis partidos y contra el AEM le tocó jugar de central ante la sanción de ‘Simona’ Botero. Mónica no solo no desentonó, sino que realizó una gran actuación estando rápida al corte y solventando las acciones de peligro. Dos años y medio después de su debut, vuelve al primer equipo, aunque esta vez, la toledana ha llegado para quedarse.