EDITORIAL
Esta semana el ex jugador del Rayo Vallecano Tito ha sido protagonista en Unión Rayo debido a su regreso este domingo a Vallecas en el enfrentamiento entrel Rayo B y el AD Complutense. El lateral atendió a nuestros micrófonos y volvió a dejar claro en una entrevista la forma de actuar de este club. Para nosotros, mejor que se diga tarde a que no se digan las cosas.
La figura del jugador de Alcalá de Henares cambió radicalmente para muchos tras su marcha al Granada tras bajar a Segunda. Pero gran parte de los rayistas no olvidan el ‘Tito y diez más’ que se decía en Vallecas. Un jugador que, hay que decirlo claramente, honró la camiseta en cada partido dando el cien por cien.
Puede ser que Tito no fuera el mejor capitán del mundo (no todo jugador sirve para ello) y puede que su segunda etapa no fuera la mejor en cuanto a rendimiento ni personal ni en el equipo; pero Tito es parte de la historia franjirroja y esta debe cuidarse. Lo cierto es que un jugador que ha vestido 240 veces la camiseta del Rayo merece un pequeño homenaje. Y no salir como lo tuvo el verano pasado sin ninguna mención en redes sociales ni un simple GRACIAS.
Revindicar hoy un gracias a Tito es revindicar el GRACIAS de Joni (por poner un ejemplo) de mañana ¿Por qué se le hace homenaje a Trashorras y Amaya y no a Tito, Míchel, Paco o Javi Fuego? La directiva, encabezada por Raúl Martín Presa, está eligiendo a dedo quién debe pasar a la ‘historia’ del Rayo y quien merece un reconocimiento. Y esto tiene que dejar de pasar.
Es entendible que la afición haga un homenaje a quien quiera y quien prefiera; pero el club debe ser agradecido con todos y más con quienes han hecho historia en esta entidad. Hemos visto a Miñambres despedirse en una sala de prensa sin escudos, a Míchel no despedirse sobre el césped como jugador, a Javi Fuego ser ‘vetado’… Tito no merece volver de esta manera a Vallecas. Otra más.