Una vez acabada la temporada del filial del Rayo Vallecano y hecho el balance es el momento de mencionar a los destacados del equipo. No ha sido fácil elegir solo a cinco jugadores, más cuando en ciertas posiciones la competencias del equipo ha hecho tener que destacar a varios. Es por eso que vamos a hacer este top en forma de las claves que hemos destacado.
Defensa. Iker Recio y Gimeno
Los dos jugadores del filial del Rayo Vallecano han sido de lo más destacado en la zaga, que sobre todo en la segunda vuelta fue clave en los éxitos del equipo. Iker en su primera temporada en el Rayo y Gimeno en su segunda han sido fijos en la zaga, a veces compartido la posición de centrales y otras con Iker como jugador de banda, bien de lateral o carrilero.
Iker Recio además sabe lo que es debutar con el primer equipo, lo hizo en Copa del Rey frente al Elche. Tanto él como Gimeno no sólo han defendido en el equipo, también se han incorporado con criterio, Iker llegando desde atrás y Gimeno como rematador de los balones parados.
Versatilidad. Nacho Fariña
Centrocampista de origen este año se ha tenido que adaptar a otra posición. El carril derecho necesitó de un jugador que en el equipo no había de forma natural después de la baja de Boigues y Nacho tomó esa responsabilidad cumpliendo con nota. Más destacado en ataque que en defensa (donde cumplió con creces) aportaba una llegada por banda que generaba mucho peligro. Con el filial ha sido su última temporada ya que supera los 23 años y después de finalizar su contrato no continuará en el Rayo Vallecano.
El orden. Manu Navarro
El cerebro del Rayo Vallecano B ha terminado siendo uno más en el primer equipo con las llamadas de Iraola no solo a entrenamientos sino también a los partidos. Encargado de mover al equipo del centro del campo hacia delante lo ha hecho con sus cualidades, manteniendo el balón pegado a sus pies y buscando siempre la mejor opción de pase. Su contrato también termina este verano y habrá que estar pendiente dónde acaba la joven promesa del Rayo Vallecano.
La creatividad. Álvaro Aguirre
Ha terminado la temporada siendo el máximo asistente del equipo y siempre creando peligro, por una banda o por la otra, si no podía rematar él buscaba que otro lo hiciese. No sólo ha destacado en el último pase, también en el movimiento de balón en el campo rival y las carreras por la banda en las que no había miedo a encarar. Su contrato también termina este verano.
El gol. Marc Echarri y Luis Molina
Han demostrado que son delanteros, los dos máximos goleadores del equipo han tenido una temporada muy sana que ha tenido un beneficiado común aparte del suyo propio: el equipo. Marc fue el que comenzó siendo el goleador del equipo con Luis recuperándose de una lesión. En enero fue Marc el que tuvo que salir del equipo durante un tiempo y ahí Molina tomó las riendas del gol.
Ambos acabaron la temporada en racha y dicho por ellos, se alegraban cuando marcaba su compañero. Una pareja que ha dado mucho gol al filial este año y que no seguirán ninguno de los dos ligado al club.