El sistema del videoarbitraje no termina de convencer a los aficionados de algunos equipos. Entre ellos los del Rayo Vallecano que ya manifestaron a través de un encuesta en este medio que se sienten perjudicados. Las últimas jornadas no han ayudado a ello. En cuatro acciones polémicas en cuatro goles decisivos en las últimas cuatro jornadas el VAR no sirvió para anular ninguno de los cuatro tantos.
La primera jugada es la menos clara. Aunque en el partido ante el Atlético de Madrid muchos aficionados sostienen que Morata está en fuera de juego posicional, los colegiados sostienen que según las últimas instrucciones de la RFEF es que no es fuera de juego. Un gol que significó la victoria rojiblanca en Vallecas. Quizá una polémica evitable si los criterios fueran fijos y no se cambiaran cada cierto tiempo. En dicha jugada el colegiado no fue a la pantalla a consultar.
Hace tres semanas la polémica fue más clara aún. Con 0-0 en el marcador, un balón largo la disputan Álex Moreno y Foulquier. El jugador del Getafe va a por el balón y pasa por la trayectoria del lateral del Rayo. A pesar de ello no toca el balón (pero sí hace por disputar la pelota), un compañero llega a por el esférico y termina en gol de Mata que abre el marcador. El colegiado consultó el VAR en el campo, pero dio el gol al equipo azulón.
En la pasada jornada también hubo un gol decisivo en el que el VAR no entró. En el primer gol del Girona, Stuani y Comesaña pugnan por un balón hasta el punto que el uruguayo toca el balón con el brazo izquierdo. Voluntario o no, ese toque permite que el esférico quede muerto dentro del área y Stuani haga el 0-1 en el marcador; decisivo para llevarse los tres puntos el conjunto catalán de Vallecas. El colegiado tampoco fue a revisar al jugada en la pantalla del VAR.
Esta semana el VAR volvió a protagonizar las críticas de los aficionados franjirrojos. Con 1-1 en el marcador en el Camp Nou, Semedo cae dentro del área tras una disputa con Amat. El central roza al futbolista y se deja caer (el propio jugador portugués lo reconoció posteriormente). Un toque leve que el colegiado interpreta que es penalti. Desde el VAR se ve que el contacto es pequeño, pero prevalece la decisión del árbitro; quien no consulta tampoco la pantalla del VAR.
Cuatro jugadas decisivas que no justifican la mala racha del equipo ni el mal juego; pero que se suman a otras jugadas durante el año que no beneficiaron al conjunto rayista. Además el Rayo es de los equipos más ‘perjudicados’ a la hora de un árbitro cambiar su decisión tras consultar el VAR.