El Gobierno español ha desvelado sus planes para una reforma trascendental en el sistema de pensiones de viudedad, lo que marca un hito en la política social del país.
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, anunció durante su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo la intención del Ejecutivo de reformar las prestaciones de muerte y supervivencia, específicamente las pensiones de viudedad y orfandad.
Qué cambia en la pensión de viudedad
La propuesta principal consiste en modificar la manera en que se calcula la cuantía de la pensión de viudedad, tomando en consideración los años cotizados por el fallecido. Esto equipararía el método de cálculo al utilizado para determinar las prestaciones de jubilación, buscando una mayor equidad y coherencia en el sistema de seguridad social.
Sin embargo, esta medida podría conllevar un recorte en las prestaciones para ciertos beneficiarios, especialmente aquellos cuyos cónyuges hayan tenido carreras laborales cortas o interrumpidas, lo que suele afectar a los trabajadores más jóvenes. Ante este posible impacto negativo, el Gobierno se ha comprometido a implementar salvaguardas para proteger a las viudas y viudos mayores de 65 años que dependan principalmente de esta pensión como fuente de ingresos.
La reforma de las prestaciones de muerte y supervivencia ha sido un tema de debate prolongado en España, y el anuncio de Saiz representa un paso significativo hacia su materialización. Actualmente, se están llevando a cabo negociaciones con las principales partes interesadas, incluidos los sindicatos y las patronales, para abordar diversos aspectos relacionados con el sistema de pensiones, como la compatibilización entre salario y pensión, las jubilaciones anticipadas y el tratamiento de la incapacidad temporal en colaboración con las mutuas.
Estos esfuerzos están en línea con las recomendaciones del Pacto de Toledo, un acuerdo multipartidista que busca garantizar la sostenibilidad y la equidad del sistema de pensiones en España. Firmado por todos los partidos políticos en noviembre de 2020, el pacto insta al Gobierno a ajustar las pensiones de viudedad a las nuevas realidades sociales y económicas, con el objetivo de mejorar la protección de los pensionistas sin recursos adicionales.
Cómo se calcularán las pensiones
En cuanto al método de cálculo de la cuantía de la pensión, la propuesta implica un cambio significativo. En la actualidad, la cuantía se determina principalmente como un porcentaje de la base reguladora de la prestación, que puede variar entre el 52% y el 70%, dependiendo de varios factores, como la situación laboral del fallecido y la causa de su muerte. Con la reforma propuesta, se tendrán en cuenta los años cotizados por el fallecido, lo que podría resultar en una reducción de la cuantía inicial de las pensiones de viudedad.
Es importante destacar que el gasto en pensiones ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años en España. Según datos oficiales, el gasto en pensiones ha aumentado hasta alcanzar los 2.100 millones de euros, lo que representa un incremento del 40% en la última década. Actualmente, alrededor de 2,3 millones de personas reciben pensiones de viudedad en España, y este gasto constituye aproximadamente el 20% del gasto total en pensiones de la Seguridad Social.
La reforma propuesta por el Gobierno es un intento de garantizar la sostenibilidad a largo plazo del sistema de pensiones y adaptarlo a las nuevas realidades demográficas y laborales. Sin embargo, su implementación requerirá un delicado equilibrio entre la necesidad de asegurar la viabilidad financiera del sistema y el objetivo de proporcionar una protección adecuada a los beneficiarios de las pensiones de viudedad. En este sentido, el Gobierno está trabajando para garantizar que cualquier cambio en el sistema se realice de manera justa y equitativa, protegiendo a aquellos que más lo necesitan.