La Agencia Tributaria ha introducido algunos cambios en la declaración de la renta. Si eres de los contribuyentes que actualmente gana entre 22.000 y 35.200 euros anuales, esta información te interesa. Si te pillan desprevenido, Hacienda te la puede liar. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre estas modificaciones y còmo pueden afectarte.
Información sobre las retenciones fiscales
Como es sabido, durante el año 2022, el Gobierno español introdujo algunas modificaciones en el Reglamento del Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas (IRPF). Dichas modificaciones surtirían efectos a partir de 2023 y ampliarían el límite máximo de retención a los salarios de hasta 35.200 euros.
Esto significa que los contribuyentes que ganan al menos 22.000 euros anuales (este es el umbral para presentar la declaración de la renta) podrían ver reducido el monto de su retención, es decir, de la cantidad de dinero que retienen sus empleadores en la nómina.
Sin embargo, el alcance de esta reducción varía en función de las circunstancias individuales, como el número de personas a cargo y si el cónyuge contribuye a los ingresos del hogar o no.
El problema de los ajustes y devoluciones en la declaración de la renta
Pero ¿cuál es el problema? La cuestión es que, aunque la reducción en las retenciones puede significar más dinero en tu bolsillo, también podría traer consigo una desagradable sorpresa cuando llegue el momento de presentar la declaración de impuestos.
Ten en cuenta que cuanto menos retenga Hacienda por adelantado, mayor puede ser tu monto por deber en la declaración de la renta. La razón es simple: las retenciones menores implican un mayor ajuste a la hora de tributar para compensar el déficit de ingresos recaudados a lo largo del año.
Algunos expertos y medios se han pronunciado al respecto y calculan que los contribuyentes que ganen entre 22.000 y 35.200 euros anuales tendrían que desembolsar entre 400 y 900 euros a Hacienda a la hora de hacer la declaración.
Todavía hay esperanza
No todo está perdido. La reciente subida del umbral exento de IRPF publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), puede suponer un cierto alivio.
Es decir, las personas físicas que ganen 15.876 euros anuales o menos están exentas del IRPF. Incluso, esta exención puede elevarse a 19.267 euros anuales si el contribuyente tiene dos o más personas a su cargo y su cónyuge gana menos de 1.500 euros al año.
¿Cuál es el objetivo de estas modificaciones?
El objetivo de estos cambios es, por una parte alinear el umbral de exención con el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y por otra parte, evitar lo que se conoce como «precipicio fiscal», lo que consiste en una subida brusca de impuestos por superar un umbral.
Por consiguiente, al elevar el umbral de exención y reducir las retenciones para quienes ganan 22.000 euros o menos, la Agencia Tributaria espera aliviar la carga fiscal de millones de trabajadores y jubilados. Teniendo en cuenta las estimaciones del Gobierno, estas modificaciones beneficiarán aproximadamente a 5,2 millones de contribuyentes, lo que supondrá un ahorro colectivo de 1.385 millones de euros.
Conclusiones
En primer lugar es importante resaltar que aunque la perspectiva de una reducción de las retenciones fiscales pueda parecer atractiva a primera vista, es esencial tener en cuenta las posibles implicaciones a largo plazo.
En segundo lugar, es imprescindible que los contribuyentes que ganan entre 22.000 y 35.200 euros anuales se mantengan al tanto de estos cambios y si es posible, se preparen para presentar una correcta declaración de la renta. De esta forma evitamos sorpresas desagradables a la hora de realizar los pagos correspondientes.