En un esfuerzo por hacer frente a los desafíos económicos planteados por la creciente inflación, el gobierno español ha anunciado una nueva revalorización de las pensiones que se extiende ahora a las pensiones por discapacidad o incapacidad permanente. Esta medida busca abordar las necesidades financieras de aquellos trabajadores y trabajadoras cuya capacidad laboral se ve afectada por enfermedad o accidente.
Las pensiones por incapacidad permanente, otorgadas por la Seguridad Social, están destinadas a compensar la pérdida de ingresos de aquellos trabajadores que experimentan una reducción significativa o la anulación completa de su capacidad laboral debido a enfermedad o accidente. Sin embargo, acceder a estas pensiones no es tarea fácil, ya que se requiere cumplir con varios requisitos estrictos.
Para ser elegible para una pensión por incapacidad permanente en España, los solicitantes deben cumplir con los siguientes requisitos:
- Tener entre 18 y 65 años.
- Residir en España durante al menos 5 años, dos de los cuales deben ser consecutivos.
- Presentar un grado de discapacidad igual o superior al 65%.
- No superar el límite de ingresos anuales establecido para las pensiones no contributivas de jubilación.
Cómo solicitar la incapacidad permanente
La solicitud de incapacidad permanente es un proceso riguroso que implica cumplir con una serie de requisitos establecidos por la Seguridad Social. En primer lugar, el solicitante debe estar afiliado y en alta en la Seguridad Social, así como haber agotado el período de incapacidad temporal correspondiente. Además, se requiere un período mínimo de cotización, el cual varía dependiendo de la edad y el tipo de incapacidad.
Es esencial que la enfermedad o lesión que causa la incapacidad esté debidamente documentada y evaluada por un médico del Instituto Nacional de la Seguridad Social, asegurando que sea permanente y incapacitante para el trabajo. La presentación de la solicitud se realiza en el Instituto Nacional de la Seguridad Social, acompañada de la documentación necesaria, como el formulario de solicitud, el Documento Nacional de Identidad (DNI), informes médicos detallados y partes de baja por enfermedad o accidente.
Posteriormente, la solicitud es evaluada por el Tribunal Médico de la Seguridad Social, que realiza un examen exhaustivo para determinar la gravedad de la incapacidad y el grado correspondiente. Este proceso implica una evaluación de la enfermedad o lesión, las secuelas que haya dejado, así como la capacidad residual del trabajador para desempeñar cualquier actividad laboral.
Enfermedades para solicitar la pensión por discapacidad
Es importante destacar que la concesión de una pensión por incapacidad permanente no está determinada por una lista fija de enfermedades. En cambio, la evaluación de la incapacidad la lleva a cabo un Tribunal Médico, el cual determina si el trabajador está realmente incapacitado para trabajar debido a su condición médica.
Aunque no hay un listado oficial de enfermedades que otorgan automáticamente el derecho a una pensión por incapacidad permanente, algunas condiciones médicas comunes que podrían calificar incluyen enfermedades crónicas, lesiones graves y trastornos incapacitantes.
Enfermedades con las que puedes solicitar una discapacidad:
- Agorafobia
- Alcoholismo
- Alzheimer
- Ansiedad
- Aneurisma
- Apnea del sueño
- Arteriosclerosis
- Artritis
- Artritis reumatoide
- Asma
- Problemas y enfermedades de caderas
- Cáncer
- Cardiopatías
- Enfermedad en los codos
- Colitis ulcerosa
- Charcot-Marie-Tooth
- Demencia
- Depresión
- Dermatitis
- Desprendimiento de retina
- Enfermedad de Behcet
- Enfermedad de Crohn
- Epilepsia
- Enfisema Pulmonar
- Enfermedad de Perthes
- Enfermedad de pies
- Enfermedad de manos
- Esclerosis Múltiple
- Esclerosis Lateral Amiotrófica
- Esquizofrenia
- EPOC
- Espondilitis Anquilosante
- Fibromialgia
- Fatiga Crónica
- Glaucoma
- Gonartrosis
- Hernia Cervical
- Hipoacusia
- Hipertensión pulmonar
- Enfermedad del hombro
- Ictus
- Infarto agudo de miocardio
- Insuficiencia mitral
- Insuficiencia renal crónica
- Ludopatía
- Lumbalgia
- Lupus
- Miastenia Gravis
- Migraña
- Neuropatía
- Neuropatía óptica
- Obesidad mórbida
- Pancreatitis
- Parkinson
- Pérdida de visión
- Síndrome de Arnold Chiari
- Síndrome de Burnout
- Sarcoidosis
- Sensibilidad química
- Síndrome de cola de caballo
- Síndrome de Lambert-Eaton
- Síndrome de Ménière
- Síndrome de Wolf-Parkinson-White
- Taquicardias
- Tetralogía de Fallot
- Trasplante de riñón
- Trastorno bipolar
- Traumatismo craneoencefálico
- Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
- Trastorno de estrés postraumático
- Uveítis
Finalmente, serán los directores provinciales del INSS o del ISM quienes emitan una resolución expresa declarando el grado de incapacidad, a partir del cual se puede solicitar la revisión de la incapacidad debido a un empeoramiento o mejora.