El Rayo Vallecano cerró la séptima jornada de LaLiga recibiendo al Elche en Vallecas el pasado lunes a las 21h (con victoria 2-1). El equipo de Iraola consiguió dominar en el juego durante la primera mitad aunque en el marcador empezó haciéndolo el Elche. El conjunto visitante buscó perder tiempo, algo que no gustó a los de casa.
Cuando el encuentro tan solo llevaba un cuarto de hora jugado se empezó a notar este tipo de acciones que no terminaron de gustar al Rayo. En cada saque de puerta o de banda los jugadores del conjunto ilicitano aprovechaban para rascar algunos segundos al marcador en busca de su ventaja. La afición hizo saber su desaprobación por medio de sonoras pitadas cada vez que esto ocurría.
Además de las sonoras pitadas el propio técnico del Rayo Vallecano, Andoni Iraola, se quejó en el pitido del final del primer tiempo al colegiado. La conversación entre Figueroa Vázquez y el entrenador del Rayo no fue a mayores pero sin duda en el conjunto local no sentó bien que la primera parte terminase sin tiempo extra. En la segunda, Edgar Badía vio la cartulina por continuar con las pérdidas de tiempo.