El Rayo Vallecano está en su mejor momento de la historia. Pero las gradas del estadio de Vallecas no estuvieron repletas para despedir el año ante el Deportivo Alavés.
Las entradas, al contrario que ante el Espanyol, no se agotaron y apenas algo más de 7900 espectadores acudieron al encuentro disputado el pasado sábado.
Vallecas no se llenó ante el conjunto vitoriano y registró su cuarta entrada tras los partidos ante Espanyol, Barcelona y Celta de Vigo donde se superaron los 8000 e incluso 9000 aficionados. La única diferencia respecto a otros partidos fue una subida de cinco euros en la venta de entradas.
Una jornada más se pudo ver a aficionados visitantes mezclados con hinchas franjirrojos. Los fans del Alavés no tuvieron disponibles entradas visitantes para el encuentro.