
“Gazzaniga sostiene al Rayo en Murcia”
El Rayo Vallecano venció 0-1 ante el UCAM Murcia en el Estadio de La Condomina en la trigésimo cuarta jornada de la Liga 1│2│3. El conjunto de Míchel suma cinco jornadas sin perder. El partido estuvo marcado por la soberbia actuación de Paulo Gazzaniga. El meta rayista salvó a los de Michel en varias ocasiones cuando ya se cantaba el gol en las gradas de la Condomina e hizo bueno el tanto de Javi Guerra tras un remate de cabeza mediada la primera parte. Los franjirrojos consiguen así tres puntos muy importantes que les permiten respirar y ver el infierno de 2ªB a cuatro puntos.
Inicio dubitativo y gol a balón parado
El Rayo se enfrentaba en la Condomina al UCAM Murcia en un encuentro que se antojaba vital en la lucha por la salvación frente a un rival directo que antes del partido tenía un punto más que los franjirrojos. Para tratar de aumentar la racha de cuatro partidos puntuando y buscar encadenar dos victorias seguidas fuera de casa, Michel optó por su once de gala con la excepción de la baja de Dorado por lesión (arrastró unas molestias musculares durante toda la semana y finalmente no se recuperó) al que sustituyó Zé Castro.
El inicio no fue nada bueno para los rayistas, que no encontraban la posesión de balón, y el UCAM cada vez estaba más cómodo y llegaba con más peligro. Fruto de ello fueron dos buenas ocasiones que a punto estuvieron de acabar en gol, pero Beltrán en una de ellas y Gazzaniga en otra evitaron el tanto local cuando la afición ya lo festejaba. Pero cuando el Rayo se estaba viendo completamente superado, apareció el mejor Javi Guerra con un testarazo tras una falta lateral lanzada por Ebert para adelantar a los franjirrojos y marcando así el que suponía el séptimo gol del delantero en lo que va de temporada.
Los de Michel marcaban en su primer acercamiento, lo que les hizo coger confianza y adelantar líneas. Los pases eran más fluidos y, aunque lejos del buen juego mostrado en anteriores encuentros, el equipo no sufría tanto y se estiraba cada vez más. Poco después Comesaña disparaba desviado sobre la portería de Fernando y acto seguido era Gazzaniga el que respondía con una mano salvadora a un buen lanzamiento de Collantes.
Antes del descanso el Rayo tendría un par de acercamientos con peligro con sendas faltas laterales que a punto estuvieron de acabar en gol. Finalmente se llegaba al entretiempo con un 1-0 quizá inmerecido pero que suponía un estímulo enorme de confianza para los de Michel con vistas a la segunda parte.
Más de lo mismo con un Gazzaniga estratosférico
El encuentro se reanudó como había terminado: imprecisiones en ambos equipos e igualdad en el medio del campo. Nadie conseguía imponer su juego, y las ocasiones brillaban por su ausencia.
Corría el minuto 66 y prácticamente no se habían pisado ninguna de las dos áreas. Tratando de corregir esto y de meter aire fresco en la medular, Michel daba entrada a Raúl Baena en detrimento de un Roberto Trashorras que había estado muy gris hasta el momento. Se notaba el nerviosismo en los jugadores de ambos equipos, que no conseguían dar más de tres pases seguidos, y el balón seguía sin correr mientras el partido se trababa entre faltas y más faltas.
Fue entonces cuando, tras una pérdida de balón rayista en línea de tres cuartos, Collantes se quedó solo frente a Gazzaniga, que hizo una de las paradas de la jornada salvando momentáneamente los tres puntos para su equipo. Gran estado de forma el que atraviesa el portero argentino que, tras un inicio de temporada dubitativo, se está erigiendo como uno de los mejores arqueros que ha pasado por Vallecas en los últimos años. Minutos después era Salvador el que estrellaba una falta peligrosísima en el palo izquierdo de la portería rayista. El conjunto de Michel sufría, y la victoria pendía de un hilo.
La réplica llegaba con un remate de Manucho que se marchaba rozando la madera. Se llegaban a los últimos 10 minutos de partido, y el encuentro se había convertido en un correcalles en el que ningún equipo tenía el control de la pelota. En el 88, Gazzaniga volvía a hacer de las suyas al enviar a córner un disparo cruzado muy peligroso. Y cuando moría el partido, el portero argentino sacaba un remate a bocajarro desde el interior del área pequeña. Partidazo del arquero rayista ante el que cualquier elogio se queda corto.
Con el pitido del colegiado, el Rayo sumaba una nueva victoria que pone a los de Michel a cuatro puntos del descenso y asienta al equipo en mitad de la tabla. Próxima parada: el Lugo en el Estadio de Vallecas.
