En el minuto 60, cuando el Rayo Vallecano caía 3-0 en el marcador, Isi caía en el área rival, y el árbitro señalaba penalti. En primera instancia, el árbitro parecía no tener dudas, pero había que esperar a la decisión del VAR.
Tras varios minutos de espera, que al conjunto franjirrojo se le hicieron largos, porque tenían trabajo por delante, el colegiado del partido indicó que tenía que acudir a revisar él mismo la jugada. Después de revisarla, señalaba que no existía penalti.
En ese momento, el equipo franjirrojo tenía dudas, la jugada parecía clara. El defensa de la Ponferradina, en busca de robar ese balón, arrollaba a Isi, ex de la Ponferradina. Finalmente, Joni tuvo que soltar el balón, que tenía ya listo para colocar en el punto de penalti, y el colegiado mediante bote neutral dejaba continuar el juego.