La camiseta blanca con la franja roja es mucho más que un sello de identidad para el Rayo Vallecano. Esta temporada, además, es un talismán, ya que solo consigue los tres puntos cuando la viste.
En el Estadio de Vallecas, donde siempre se viste la primera equipación, el conjunto de Iraola ha sumado todos los puntos que ha disputado. Fuera de casa, donde esa equipación no es fija, es donde llega el problema.
Cinco han sido los partidos que el conjunto franjirrojo ha salido, y sólo suma una victoria. Llegó en Mallorca, en la primera jornada, y el conjunto de Vallecas vistió la primera equipación. Después ha viajado a cinco estadios diferentes, donde ha compaginado la segunda y la tercera vestimenta. En esos encuentros ha sumado un empate y tres derrotas.
Este domingo le tocaba visitar el Anxo Carro y lo hacía con la segunda equipación. Aunque el empate estuvo cerca, nunca acabó llegando y suma otra derrota. Esto hace que el Rayo Vallecano no sepa ganar si no es con su primera vestimenta.