El Rayo Vallecano no pudo pasar del empate a uno ante el Oviedo. Generó muchas ocasiones, sobre todo en el primer tiempo, pero se encontró con un grandioso Andrei Lunin que lo paró prácticamente todo.
Y es que el guardameta ucraniano fue el héroe de la tarde. Hizo cuatro paradas fundamentales que sirvieron para que el conjunto asturiano se llevara un punto del Estadio de Vallecas.
Mario Suárez tuvo dos ocasiones muy claras de cabeza en la primera parte, pero el portero cedido por el Real Madrid las desvió con dos grandes intervenciones. Álvaro García también dispuso de una buena oportunidad con un remate alto centrado que también fue repelido por el arquero del Oviedo.
Además, estuvo muy cerca de detenerle el penalti a Ulloa, ya que adivinó y tocó el lanzamiento, aunque no imprimió la fuerza suficiente para evitar el tanto del delantero rayista.
Pero esta no es la primera vez que Lunin se exhibe en el feudo franjirrojo. La temporada pasada jugó con el Leganés en dieciseisavos de la Copa del Rey, donde volvió a ser un auténtico muro. Le paró un penalti a Bebé y su equipo terminó venciendo 0-1.
Al terminar el encuentro, el técnico del cuadro ovetense Javi Rozada fue preguntado por él y afirmó que “había hecho un gran partido, que estuvo muy bien y muy valiente en los balones por alto”, reconoció que “tuvo paradas clave” y señaló que “pertenece al Real Madrid y está en el Oviedo para crecer y ser mejor portero”.