El Rayo Femenino continúa con sus problemas. Ninguna persona del cuerpo técnico de esta temporada puede saltar al campo a atender a las futbolistas en caso de requerirlo durante sus encuentros en estas primeras jornadas de la Primera Iberdrola.
Los miembros del cuerpo técnico no tiene autorización para saltar por las árbitras de la RFEF (solo pueden médicos o fisios). De hecho este miércoles ante el Sporting Huelva, los servicios médicos del club onubense (otros equipos sí tienen varias figuras que pueden entrar) tuvieron que atender a una jugadora del Rayo Femenino en el campo 4 de la Ciudad Deportiva.
Esta temporada el club rayista no tiene fisioterapeuta, una figura que sí ha existido durante las últimas temporadas y es que primordial en el trabajo de un equipo profesional de fútbol. El año pasado Blanca Crespo (fisio) era quien saltaba a atender a las jugadoras. Desde hace muchos años tampoco tiene cuerpo médico (ya se denunció en este medio tras el fuerte choque de Patricia Larqué la temporada pasada).
Uno de los miembros del cuerpo técnico es David Recuenco quien llegó como preparador físico aunque tiene estudios de fisoterapeuta. Está ayudando en el día a día también con ese trabajo pero el día del partido ocupa ficha de preparador físico y no puede saltar al campo.
Según ha podido saber Unión Rayo, una fisio llegó con el cuerpo técnico para incorporarse al equipo pero ella fue la única que no firmó por no aceptar las condiciones del club que la ofrecieron (tras el lío de los contratos). Desde entonces nadie ha podido suplirla ni ha aceptado esas condiciones. La única ‘solución’ del club ha sido buscar a gente en prácticas que se están apenas unas semanas en el día a día.
Por otro lado, el Rayo Vallecano tampoco tiene la figura de delegado que otros años sí se ha cubierto. Por ahora es el preparador de porteras Jorge Mora quien está haciendo también una doble función.
