“Este Rayo tiene hambre”
El Rayo Vallecano venció al Almería por 1-0 este jueves en el Estadio de Vallecas en un encuentro que supuso la segunda victoria consecutiva de los franjirrojos y donde los de Michel demostraron que la falta de gol es ya un problema del pasado. Esta vez fue Santi Comesaña el que sacó las castañas del fuego para colocar al Rayo séptimo, a tres puntos de la cabeza.
Hambre de más
El Rayo recibía al Almería con la moral por las nubes tras su victoria por 4-1 frente al Valladolid y con la firme intención de conseguir el segundo triunfo en cinco días. Para ello, Míchel optó por dar descanso a Álex Moreno y otorgar una oportunidad a Sergio Akieme en el lateral izquierdo por primera vez en toda la temporada. En ataque, todo igual, con la ETT (Embarba, de Tomás y Trejo) como referencia arriba.
Que este Rayo tiene hambre es evidente, y nadie encarna esto mejor que Fran Beltrán. El canterano recogió el esférico en la frontal del área en el primer minuto y disparó duro obligando a estirarse a René para evitar el gol. Poco después era de Tomás el que marraba una buena ocasión tras un centro medido de Embarba desde la derecha. Buen inicio de los de Michel, que presionaban muy arriba la salida de balón del Almería.
Los franjirrojos eran una tormenta, de la que los andaluces solo podían resguardarse a base de balones largos. De hecho, las únicas ocasiones de los de Ramis llegaban a la contra tras algún error defensivo rayista. El partido era un monólogo vallecano, pero el gol no llegaba, y la grada comenzaba a ponerse nerviosa. Se creaban ocasiones, pero hasta Trejo fallaba lo infallable: increíble el balón que mandó a las nubes ‘Chocota’ desde el área pequeña.
Del posible 0-1 a la roja a Morcillo
Y cuando todo apuntaba al empate sin goles al descanso, llegaba la montaña rusa. Del posible 0-1 en un balón que se paseó por el área pequeña franjirroja a un contragolpe mortal que Morcillo paró en falta siendo el último hombre. Roja y el Almería con 10. Con este panorama terminaba la primera parte, y los de Michel tenían 45 minutos por delante para llevarse los tres puntos ante un equipo con uno menos.
Y la segunda parte no podía empezar mejor, tras varios córners seguidos, Santi Comesaña engachaba un buen remate que adelantaba a los suyos. 1-0 y el partido controlado. Para más inri, Manucho redebutaba con la franja, y la grada enloquecía. Deberían estudiar en las universidades el paranormal caso de la simbiosis entre afición y Manucho, inexplicable y, a la vez, entrañable.
Con su equipo ya por delante, Michel decidió dar entrada a Chori buscando calidad en el último pase en lugar de un Raúl de Tomás que completó un buen partido. Poco a poco, el encuentro se fue volviendo algo bronco y falto de ritmo, pero el reloj corría a favor de los rayistas. A falta de cinco minutos, Pozo, el mejor del Almería, entró a destiempo sobre Embarba y recibió la segunda amarilla para dejar la victoria franjirroja a punto de caramelo.
Con esta victoria, el Rayo Vallecano suma 15 puntos y se coloca a tan solo 3 del líder, el Osasuna. Próxima parada: el domingo en Reus.