(Foto: El País)
El ‘Caso Oikos’ ha sacudido el mundo del fútbol. Una presunta red criminal formada con el objetivo de amañar partidos para obtener un beneficio económico cuyos cabecillas son, presuntamente, Raúl Bravo y Agustín Lasaosa (presidente del Huesca), ambos con pasado franjirrojo.
Raúl Bravo fue futbolista del Rayo Vallecano durante la temporada 2011-12 jugando seis partidos de Liga y uno de Copa.
Lasaosa, actual presidente del Huesca, fue miembro de la dirección deportiva del Rayo en la década de los 90. De hecho, Lasaosa era el responsable de ese área cuando Míchel I de Vallecas dio el salto al primer equipo desde el equipo juvenil.
Junto a estos nombres también se encuentran otros implicados: Borja Fernández, del Valladolid; Carlos Aranda, exjugador de numerosos equipos de Primera; Samu Saiz, del Getafe; e Íñigo López, actualmente en el Deportivo de La Coruña.
Además también se encuentra detenido Juan Carlos Galindo, jefe de los servicios médicos del club oscense.