Llegó el fin de una gran temporada del Juvenil A. Terminando en cuarto lugar con 66 puntos tan solo por detrás del Atlético de Madrid, Real Madrid y Leganés y habiéndose clasificado a Copa del Rey cuatro años después, el equipo de Iván Amaya ha hecho disfrutar a los aficionados rayistas devolviendo la ilusión de una cantera, que compite y lucha contra los grandes.
Todo trabajo tiene su recompensa. Tras 193 sesiones de entrenamiento en las que cada jugador y miembro del cuerpo técnico han dado todo de su parte para que esta plantilla consiga su objetivo, este “barquito” ha llegado a buen puerto.
Con un total de 61 goles a favor y 26 en contra en 34 encuentros ligueros, el Juvenil A ha vuelto a lo más alto de la clasificación compitiendo contra grandes rivales. Además, se clasificó a la Copa del Rey, cayendo en octavos por 3-0 contra el Real Madrid, el campeón de la competición.
No hay duda, de que el fin de esta temporada pone el cierre a una generación de oro, que en las próximas semanas junto con el cuerpo técnico, conocerá su futuro, deseando que este se encuentre en el Santa Inés.