El primero de mayo, día de reivindicación laboral y lucha obrera se vio eclipsado por obra y gracia del calendario por el día de la madre, de celebración imprescindible y necesaria. Como homenaje a la primera y el último, con Prudencia Priego enmedio de ambas se enfrentaron dos equipos hermanos,dos aficiones amigas y dos entrenadores casi vecinos debido a los escasos diez kilómetros que separan Orio, cuna de Imanol y Usurbil, lugar de nacimiento de Iraola.
Por ello,en palabras de cura es justo y necesario afirmar, que el para algunos “opio del pueblo” reivindicó de aquella manera los derechos del pueblo en aras de la auténtica productividad.
El Rayo Vallecano recibió a la Real Sociedad con la obra prácticamente terminada en los plazos de entrega adecuados. Su rival, con mejores materiales, salió decidido a perfilar la suya con la mejor de las arquitecturas.
La primera mitad fue prueba de ello. La franja se vio superada por un conjunto intencionado pero poco profundo que no provocaba grandes problemas a pesar del aviso de Portu.
Los de Iraola, dominados pero no demasiado incómodos reaccionaron cuando recibieron el primer gancho de izquierda. Sorloth chocó con Catena, su hormigón había fraguado mejor, se perfiló la puso pegada al palo antes de que Dimitrievski siquiera pudiese ver la pelota. (0-1).
En cinco minutos Unai López probó por primera vez a Remiro, tentó mallas por fuera y avisó de lo que el Rayo era capaz con el orgullo herido.
Tras el descanso entró la quintaesencia del vals del obrero.
Con Óscar Valentín, obrero, solidario, líder comprometido e incisivo el partido fue otro.
Con Óscar Trejo apareció la picardía, la valentía, la osadía y la diversión.
Los primeros de mayo fueron sepultados con falsos mantras sobre trabajo y productividad, intentando convencernos de que para producir mejor era necesario trabajar más.
Algunos partidos políticos plantearon semanas laborales de menos horas o menos días y se teorizó mucho al respecto sin conseguir demasiado hasta que llegó el 3 de la franja.
Radamel Falcao García hizo una demostración, teoría y praxis de productividad. Te piden realizar un trabajo, entras, lo haces en el tiempo imprescindible, ni más ni menos y incluso estás a punto de conseguir un plus para tus compañeros, los que trabajaron sin desmayo para conseguir un objetivo que no llegaba.
El tercer García completó como solo él sabe hacer la jugada iniciada por el doble 3 Fran con un pase preciso, convertida en peligrosa por el tango con pisada de Trejo y hecha remate,medio gol de Álvaro, al que solo Remiro y el poste pudieron frenar. Ahí estaba Falcao para darle también cosas al Atleti sin jugar para ellos y empujar el balón a la jaula (1-1), casi provocar dos penales y alborotar la grada y la melena de LeNormand que celebró cada tapada como si fuera un gol.
Dijo Steve Jobs en una frase tan falsa como populista de canchero y coach digital que la única manera de hacer un gran trabajo es amar lo que haces. En el caso de Falcao y sobre todo del Rayo de Iraola no hay una verdad más grande.