“El músculo vence al talento en Vallecas”
El Rayo Vallecano cayó derrotado por primera vez en la Liga 1/2/3 frente al Osasuna en un encuentro en el que los navarros llegaron tres veces a puerta y marcaron tres goles. Los de Michel lo intentaron una y otra vez pero la efectividad brilló por su ausencia. Finalmente, los goles de Aridane y Xisco por partida doble fueron suficientes para llevarse los tres puntos rumbo al norte.
Trejo y diez más
La tarde se presentaba perfecta para ver un gran espectáculo: buen tiempo, buen ambiente y un buen rival. El Osasuna, recién descendido, llegaba a Vallecas con Roberto Torres como máxima estrella para probar a los de Michel tras la dura eliminación copera, y la afición esperaba ansiosa. En el Estadio, la megafonía se ponía en marcha, y venía con novedades: Diego Aguirre y Unai López se quedaban en el banquillo, y Lass y Fran Beltrán tomaban la alternativa. El canterano era titular por primera vez en toda la temporada, y tenía 90 minutos por delante para demostrar que merece ser el eje de este Rayo.
Además, a falta de Manucho y Raúl de Tomás, todavía cogiendo forma física, Óscar Trejo volvía a ser la referencia arriba como falso nueve. Es ya redundante, pero es un lujo ver a este jugador pasear la franja por segunda división. Balón que toca entre líneas, balón que crea peligro, y pronto quedó claro. Desde el pitido inicial, ‘Chocota’ trataba de canalizar el juego rayista, y las únicas posesiones que acababan cerca de la portería contraria pasaban antes por sus botas. Mención aparte el doble regate, caño incluido, que dejó sentado a Lucas Torró. Estratosférico. Si algo hay que achacarle a Trejo es el excesivo individualismo, pero nadie es perfecto.
Y cuando mejor estaba el Rayo, Aridane se anticipaba a los centrales vallecanos tras el bote de un córner y remataba de cabeza subiendo el 0-1 al marcador. Primer acercamiento de los navarros que les servía para ir por delante. Con el gol, los de Diego Martínez se envalentonaron, y encadenaron dos o tres llegadas con peligro que cerca estuvieron de aumentar la renta. Eso sí, poco después, los rojillos se desinflaron y el dominio regresó a tierras rayistas, aunque el luminoso ya no se movería hasta el descanso.
Un quiero y no puedo
Ya en la segunda parte, el Osasuna continuaba encerrado, y el Rayo seguía sin encontrar huecos. Buscando espolear a los suyos, Michel retiró a Lass y Galán, y dio entrada al ‘Chori’ Domínguez y a Velázquez, y los franjirrojos pasaron a jugar con defensa de tres. Apretaban los locales, pero iban contrarreloj.
El argentino, que redebutaba con la franja a sus 36 años, estuvo cerca de poner el empate en el marcador, en dos ocasiones, pero el balón no quería entrar. Lo intentaban los pupilos de Michel, pero no parecía ser el día. Por su parte, los navarros, que no habían hecho más que rematar en un córner en todo el partido, se limitaban a perder tiempo cada vez que era posible.
La más clara llegó a falta de ocho minutos, cuando Velázquez marró en boca de gol un pase medido de Embarba desde la banda derecha. El banquillo se desesperaba, y sus componentes miraban impotentes como se desvanecían los minutos uno detrás de otro. Fue entonces cuando la tragedia se hizo realidad. En una contra y con el Rayo volcado arriba, Xisco ponía el 0-2 y sentenciaba el partido. Para más inri, en la última jugada, Xisco volvió a marcar para ahondar en la herida.
Con este resultado, los de Michel cosechan la primera derrota en la Liga 1/2/3 y se colocan undécimos provisionalmente. La próxima parada: el Sánchez Pizjuán, donde el Rayo Vallecano tratará de volver a la senda de la victoria frente al Sevilla Atlético con todos los fichajes, en principio, ya disponibles.