“Las finales no se juegan, se ganan”
El Benjamín “A” del Rayo Vallecano de Madrid se proclamó campeón del grupo 10 de la Preferente Benjamín tras su victoria por 13-2 ante la Esc.F. C.D. Mar Abierto “A”. Los pupilos de Alberto Madrid celebraron el título por todo lo alto a falta de tres jornadas, asegurándose de este modo, un puesto en el Torneo de Campeones que tendrá lugar en los campos de fútbol Ernesto Cotorruelo, como ya viene siendo habitual.
Benjamín campeón
Los precedentes avalan a el filial franjirrojo, pues el año pasado estuvo a punto de dar la sorpresa ante el Real Madrid. No obstante, la balanza se acabó decantando hacia los blancos, que consiguieron vencer por 3-2 a los vallecanos. Esta temporada, Alberto ha conseguido que un equipo tan ofensivo, no pierda eficacia arriba pero que tampoco encaje ni conceda, teniendo una brutal estadística de 190 goles a favor y solamente 14 en contra, liderado en ataque por Carlos Carmona con 32 goles en 21 encuentros y por Dante Horoshi García con 30 goles en 19 encuentros.
Respecto al encuentro contra el Mar Abierto “A”, los de Vallecas no mostraban nervios al inicio, todo lo contrario, se les veía con muchas ganas de demostrar y de hacerlo bien. Pronto empezaría la exhibición del Rayo, con un golazo de Carlos Carmona por la escuadra tras el saque de centro. Los vallecanos carburaban y capitaneados por Gonzalo, que se encargaba de mover al equipo desde atrás, el Rayo llevaba la manija del partido y quería más, se estaba cocinando el segundo. Sin embargo, el Mar Abierto “A” estaba cerrando bien espacios y Alberto tuvo que sacar a un plan “B” que era igual de competitivo que el plan “A” sustituyendo a la mayoría de jugadores sobre el terreno de juego, consiguió la frescura que le faltaba el equipo, lo que se tradujo en gol de Diego Salvador con un gran disparo abajo tras una triangulación en banda derecha.
El Rayo Vallecano tenía el control del encuentro y en esta ocasión sería Dante quién pondría el tercero en el marcador, tras una serie de paredes por banda que acabaría con un pase de la muerte perfecto para el 8 vallecano. Los franjirrojos iban a “desmelenarse” tras el descanso, anotando 10 goles más durante la segunda mitad y dejando un gran sabor de boca a toda la parroquia vallecana allí presente. Recompensa más que merecida por la gran temporada tanto por parte de los jugadores como cuerpo técnico.