‘Nunca es tarde para reencontrarse‘; por Enric Martín (Enric18Martin)
también al buen rendimiento del citado. Cuando le llegaron sus oportunidades (que las tuvo en distintos momentos) tampoco supo aprovecharlas. Podía esperarse todo de él, alternando aceptables actuaciones con otras muy desesperantes e incluso con fallos decisivos. Ni era ese jugador fiable al defender su carril ni tampoco hizo grandes aportaciones en otras facetas.
Ya en el mercado invernal de 2019, Luna estuvo en la rampa de salida. Sin reconocerse públicamente, pidió salir en caso de llegar ofertas interesantes al no sentirse todo lo cómodo que esperaba ni con el protagonismo deseado. Finalmente, se quedó. Y con el encarcelamiento de Toño, en una nueva oportunidad para convencer y afianzarse definitivamente, no lo logró.
A su favor cabe decir que con el cambio de sistema y el uso de carrileros, por momentos se vio al mejor Luna en el Levante. Pero una vez más, sin término medio. Por otra parte, coincidió con la crisis de resultados que puso en jaque la permanencia. Y al regresar Toño, en el tramo final de Liga, volvió a quedar relegado a la suplencia, ya conociendo también que el fichaje de Clerc estaba acordado.
A Luna se le trasladó que no contaría para el nuevo proyecto deportivo y que, en caso de quedarse, tendría opciones todavía más reducidas de jugar. Pese a ello, no ha sido hasta los días finales de agosto cuando se ha producido su salida, al ver que ninguna oferta convincente desde la máxima categoría llegara, también con motivo de su alta ficha que asumirá en un 60% el Levante.
Por ello, con su militancia este año en el Rayo Vallecano dispondrá de una nueva oportunidad para reencontrarse. Nunca es tarde para ello. Con un objetivo ambicioso de intentar conseguir el ascenso y sabiendo de que está llamado a ser importante, si encuentra esa confianza con su fútbol, Vallecas podrá disfrutar de una zurda muy interesante.