Adrián Embarba deja el Rayo Vallecano tras seis tempordas y media en Vallecas donde ha disputado 195 partidos y ha anotado 33 goles.
El futbolista de Azuqueca de Henares llegó al Rayo tras Juan Pedro Navarro (ex director de la cantera del Rayo) ficharlo para el filial procedente del Carabanchel; donde había realizado una gran temporada en Tercera División.
El jugador, entonces con 21 años, llegaba al Rayo B en el verano de 2013 tras el filial bajar a Tercera tras su primer periplo en Segunda B. En la pretemporada 2013-2014 Paco Jémez tuvo que tirar como cada verano de la cantera y de las categorías inferiores. Uno de esos jugadores que subieron al primer equipo en aquella temporada fue Embarba. Concretamente fue en un Trofeo de Vallecas ante el Getafe donde el extremo destacó y se presentó ante la hinchada franjirroja. Embarba se ganó un puesto en el equipo rayista y alternó primer equipo y filial dicha temporada. Jugó 13 partidos, dos de ellos titular.
En los dos siguientes años Embarba seguiría cogiendo experiencia con minutos en Primera División. En la última temporada antes de descender llegó a sumar 21 partidos como titular. Con apenas 23 años se convertía en la gran promesa de futuro del Rayo Vallecano. Sus grandes temporadas llegarían en Segunda convirtiéndose en un referente del equipo vallecano donde además aparecería su olfato goleador anotando la cifra de 15 goles entre las dos campañas. El gran jugador que es hoy era ya una realidad.
Embarba siempre ha sido querido por sus compañeros y casi nunca ha estado rodeado por polémica. Solo un pequeño episodio le marcó entre parte de la afición. En la tormentosa campaña 2016-2017, el extremo, al igual que todo el equipo, no comenzó bien. Sus numeros apenas eran buenos y en 20 jornadas solo había anotado dos goles. El atacante era discutido en Vallecas y recibió varias veces pitos desde la grada. Un 14 de enero de 2017 Embarba anotó el gol del empate ante el Sevilla Atlético. Tras anotar el futbolista se llevó la mano a la oreja. Mucha parte de la afición le ‘crucificó’ desde ese día y el extremo tuvo que salir a pedir perdón. Ese hecho le impidió que a día de hoy no se haya convertido en el ídolo de toda la hinchada vallecana.
A pesar de todo Embarba continuó en Vallecas y siguió en busca de ganarse el cariño de la afición sin nunca una salida de tono. Incluso llegando a ser uno de los capitanes del Rayo Vallecano en las últimas temporadas. Tras una buena campaña en Primera, este pasado verano el Rayo apretó para no dejarle marchar. Embarba no formó su salida y aceptó la decisión del club. Tanto que realizó sus mejores registros como franjirrojo en apenas seis meses de competición. Lo que le ha valido para fichar por el Espanyol.
Paco Jémez se ‘sacó de la manga’ un futbolista que hoy da 10 millones de euros a la entidad por un jugador que no costó nada al club tras llegar libre procedente del Carabanchel. Con 27 años Embarba busca un nuevo camino y dice adiós a Vallecas, su casa.