El partido del Rayo Vallecano frente al Sevilla que terminó en empate entre ambos equipos estuvo marcado por una polémica arbitral, en la que jugadores del Rayo Vallecano protestaron un posible penalti de Brayan Gil sobre Raúl de Tomás.
Gil Manzano se marchó muy criticado del Estadio de Vallecas. La afición se sintió gravemente perjudicada por el colegiado del encuentro. La gran polémica llega tras un empujón de Brayan Gil en el área sobre Raúl de Tomás. El delantero protestó aireadamente el penalti, pero ni Gil Manzano, ni su asistente ni el VAR vieron nada punible en esa acción.
La acción tiene lugar en el minuto 77 de partido tras un centro lateral del equipo de Andoni Iraola. El balón llegaba a la cabeza de RdT, pero el delantero no pudo rematar y se fue al suelo tras el empujón del jugador del Sevilla FC.
Además, la afición acabó bastante molesta con las faltas pitadas por Gil Manzano, 15 faltas pitadas en contra del Rayo y 6 del Sevilla con 4 amarillas para los de la franja y tan solo 1 para el conjunto hispalense.
Óscar Valentín y Lejeune opinaron de la polémica tras el pitido final. El centrocampista reconoció no haberla visto repetida y prefirió no mojarse, mientras que el goleador del encuentro, Florian Lejeune, dijo que para él si fue penalti.
