El futbolista del Rayo Vallecano, Álvaro García, realizó un trabajo en la sombra ante el CA Osasuna, correspondiente a la cuarta jornada de LaLiga Santander. Este volvió a ser determinante y mostró una gran versión pese al resultado final.
Este provocó un penalti en la segunda mitad del partido, tras una clamorosa falta del zaguero rojillo. Sin embargo, Muñiz Ruiz, el colegiado del partido, anuló esta decisión tras consultarla varios minutos con el VAR.
Además, este no paró de percutir constantemente a su marca durante los 90 minutos de partido. En una de estas acciones, a este le hicieron una falta que resultó ser la jugada en la que empataría el partido el conjunto vallecano, con un extraordinario golpeo de Florian Lejeune.