El Rayo Vallecano afronta el tramo clave de la temporada. Esas 10 últimas jornadas en las que todos los entrenadores señalan que se juegan los ascensos y los descensos. Y el equipo de Andoni Iraola lo hace con la incertidumbre de si podrá medirse a Girona y Mirandés en los próximos días.
El técnico de Usurbil parte en la posición en la que considera que es la máxima para el equipo como confesó en rueda de prensa: 6º puesto y playoff. Comparado con sus antecesores en el banquillo franjirrojo lo hace peor que Míchel en la 2017/2018 pero mejor que Jémez en la 2019/2020. El actual Rayo suma 52 puntos a falta de 10 jornadas para el final de la competición.
En la temporada que significo el último ascenso a 1ª División, el Rayo Vallecano marchaba segundo con 57 puntos. En las últimas diez jornadas consiguió seis victorias, un empate y tres derrotas (la última de ellas en Tarragona cuando ya no se jugaba nada). Acabo primero con 76 puntos, una cantidad solo alcanzable por Iraola si es capaz de sumar siete victorias y tres empates u ocho victorias y dos derrotas en estos diez últimos choques.
Con esa puntuación parece poco probable que no consiga el objetivo de luchar en la promoción de ascenso. Pero dado el ritmo actual de puntuación de los dos primeros clasificados no le garantiza el ascenso directo cómo sucedió aquella temporada.
Mucho más sencillo tiene superar los registros de Paco Jémez en la 2019/2020. Aquel Rayo comenzó el tramo final con 44 puntos obteniendo cuatro victorias, cuatro empates y dos derrotas. Finalizó séptimo con 60 puntos, a uno del playoff de ascenso que marcó el Elche (equipo que posteriormente ascendió).
Las matemáticas sugieren que el Rayo Vallecano podría terminar en torno a los 68 puntos dado su ritmo de puntos por partido pero esto es fútbol y no matemáticas y en las 10 últimas jornadas puede pasar de todo.